Capituló 9

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LOS CHICOS SE ENCONTRABAN HABLANDO DE LOS ZOMBIS Y QUE ES LO QUE LES ATRAIAN, Ha-na se encontraba recargada en la puerta abrazando sus piernas sin despegar su mirada de la sala de grabación esperando que Gyeong-su saliera de ella y que callará a N...

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LOS CHICOS SE ENCONTRABAN HABLANDO DE LOS ZOMBIS Y QUE ES LO QUE LES ATRAIAN, Ha-na se encontraba recargada en la puerta abrazando sus piernas sin despegar su mirada de la sala de grabación esperando que Gyeong-su saliera de ella y que callará a Na-yeon al no convertirse.

Alguien golpea los pies de Ha-na llamando su atención, alzando la mirada viendo a Cheong-san con una pequeña sonrisa casi invisible.

— ¿En que piensas? —se sienta a un lado de su mejor amiga—

— En que extraño al idiota —voltea a ver a la sala de grabación—. Nunca imaginé decir eso.

— Ya somos dos —el chico dirige su vista a su mejor amigo que estaba encerrado—

— ¿Crees que...? —La castaña se queda en silencio por unos segundos mirando a la nada—

— ¿Creó que? —pregunta curioso—

— Nada. Es una tontería —le sonríe y recarga su cabeza en el hombro del chico—

Cheong-san se queda unos minutos quieto estando con su amiga para luego levantarse e ir con On-jo que estaba sola.

— ¿Cheong-san y tú son pareja? —esa pregunta tomo de sorpresa a Ha-na y abre sus ojos como plato—

— Claro que no. Creo que se nota mucho que a él le gusta On-jo —Ha-na mira a sus dos mejores amigos hablando—. ¿Por qué la pregunta, Su-hyeok?

— Puedo ver que Cheong-san está enamorado de ti —comenta recibiendo un golpe por parte de Ha-na—

— Pues necesitas lentes, sin calcetines.

— ¿Tu también, Ha-na? —le pregunta y se empieza a reír—

— Pensé que no te molestaba ese apodo, sin calcetines. No dices nada cada vez que te lo dicen.

— Creo que empezaré hacer algo por cada persona que me diga así.

— ¿Si? ¿Qué cosa? —pregunta—

El chico se queda en silencio por unos segundos y se pone de rodillas para empezar hacerle cosquillas a la chica quien no pudo evitar reír al sentir las cosquillas que provocaba el pelo negro.

[...]

Ya habían pasado los treinta minutos y Gyeong-su aún no salía de la sala de grabación, Cheong-san intentó conversar al chico que saliera, pero el seguía negándose y quería esperar la hora completa.

Mientras que Cheong-san le informaba a la maestra sobre eso, Ha-na entra a la sala y se acerca a su amigo sentándose en la mesa quedándose en silencio.

— Creo que tienes razón —dice Ha-na acabando con el silencio—

— ¿Qué? —Gyeong-su voltea a ver a la castaña curioso—

— Creo que tienes razón —vuelve a decir—

— ¿En que tengo razón?

— En lo de Su-hyeok. Creo que una parte de mi siente algo por el —confiesa y eso pone alegre a su amigo al darse cuenta que siempre tuvo la razón—

— ¡Si! —se levanta de la silla emocionada saltando—. ¡Lo sabía! Te conozco bastante bien.

— Cálmate, idiota —Ha-na hace que se siente y voltea a ver atrás de ella viendo a los chicos confundidos—. Pero no le puedes decir nada. Sabes lo que pasará si eso sucede.

El chico hace como si estuviera cerrando un cierre en su boca y tira algo.

— Tu secreto está a salvo conmigo, amiga —levanta su meñique esperando que su amiga lo junte para hacer una promesa—

Ha-na junta su meñique con el de su amigo y su pulgar formando una promesa.

— Debes decírselo antes que sea tarde.

— Ya sal. Ya pasaron los 30 minutos —comenta Ha-na ignorando por completo sobre lo que digo Gyeong-su, se levanta de la mesa y va hacia a la puerta pensando que su amigo la seguía, pero al darse cuenta que seguía sentado se acerca a él—

— Me quedaré la hora completa, tú te puedes ir —le comenta el chico llevándose un golpe en la cabeza— ¡Oye!

— ¡Deja de ser tan terco! Ya paso suficiente tiempo y no te convertiste en zombi. Debes salir ya.

— Vamos pues.

Gyeong-su se levanta de la silla y Ha-na contenta camina a la puerta para salir, fue la primera en salir y la única, cuando volteo a ver a su amigo solo escuchó como cerró la puerta quedando adentro de la sala.

— ¡Te engañe! Me quedaré la hora completa —le dice sonriendo—

Ha-na se acerca a la puerta y le saca el dedo del medio enojada, no se esperaba que su amigo le engañara de ese modo.

— Yo entraré —habla Cheong-san al ver que Ha-na no logro que su amigo saliera—

— La que debería entrar es Na-yeon —observa a Na-yeon que estaba sentada en una silla mirando a los chicos—

— ¿Por qué yo? —pregunta—

— Porque el esta ahí por tu culpa —Ji-min se acerca a Na-yeon, pero On-jo la detenie—

— ¿Yo que hice? ¿Fue un error sospechar?

Otra discusión mas que Ha-na no quería ser presente de eso, se acerca a Nam-ra que se encontraba en una esquina observando todo sin decir una palabra lo cual le parecía algo gracioso ver eso. Le parecía como si Nam-ra fuera una de esas chicas que solo observa la situación como una chica chismosa.

— Hola, Nam-ra —La nombrada voltea a ver a Ha-na con una sonrisa—

— Hola, Ha-na. ¿De que hablaste con Gyeong-su para que se pusiera tan feliz? —pregunta—

— Le conté algunas cosas que el ya sabía, solo se lo confirme —le contesta sentándose en el suelo a un lado de ella—

— Entiendo. ¿Qué te gusta Su-hyeok? —la pregunta que había hecho Nam-ra provoca que los ojos de Ha-na se abrieran como plato sorprendida—

— ¿C-como lo sabes?

— Una parte de ti no disimula muy bien, pero estoy segura que el no se ha dado cuenta. Es demasiado idiota para darse cuenta que una gran chica y bastante linda está detrás de el. En lo personal no se que le ves, solo míralo —voltean a ver al chico que observaba por la ventana a Gyeong-su y a Na-yeon—

— Es lindo, es algo idiota y era un bravucón que es lo que más odio de una persona, pero cambio. Tal vez no sea uno de los mejores de la clase, pero hace su esfuerzo que es lo que cuenta.

Un grito exalta a las amigas observando de donde provenía el grito, era de parte de Gyeong-su quien había salido de la sala yendo detrás de Na-yeon queriendo golpearla. Ha-na se levanta rápido del suelo y se acerca a Gyeong-su para intentar calmarlo y evitar que golpeara a Na-yeon.

Todos se quedaron en silencio esperando que dieran una explicación de lo que había sucedido y rápido Gyeong-su le contó lo que había hecho Na-yeon, Ha-na suelta a Gyeong-su para que la golpeara, pero entre todos los chicos lo detuvieron llevándolo algo lejos de Na-yeon.

Mal Momento - 𝐿𝑒𝑒 𝑆𝑢-ℎ𝑦𝑒𝑜𝑘Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon