Tengo un mal presentimiento

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Han pasado muchas cosas en estos tiempos, priemro John se enamora de Serafina, segundo John se le declara a Serafina, tercero John es rechazado por Serafina, ahora Isen le acaba de decir a Cecile que John está enamorado de Serafina y probablemente todo acabe muy mal para Isen. La voz de una pelirosa resonó en mi cabeza y al mirar hacia abajo la vi, precente en la escena.

R: Hola Arlo, tengo que hablar con todos.

A: Tengo un mal presentimiento.

R: Ay vamos que es lo peor que puede pasar

Perdí mi voluntad ante esa mirada tan adorable que tiene este pequeño parásito rosa, llegué a la casa segura y ahí estaban esperando Blyke y Isen.

B: Bien Remi ¿Para que nos llamaste?

I: Espero que sepas que Tengo que escribir el artículo de que John fue rechazado por Serafina.

A: Dijiste que querías hablar ahora házlo.

R: Muy bien, como todos saben nuestra querida amiga Serafina, está siendo cortejada por su mejor amigo, John no puede hacer esto solo, el necesita ayuda para ligar y para conquistar a Serafina.

B: ¿A dónde quieres llegar?

I: Tengo un mal presentimiento.

A: Yo dije lo mismo cuando me arrastró aquí.

R: Escuchen, vamos a hacer esto:
Serafina debe darse cuenta que también le gusta John.

A: ¿Cómo estás tan segura de que a Serafina también le gusta?

R: Tienen mucho en común.

I: Pero muchos han intentado ligarse la, no conozco a nadie que haya salido con vida de ese frío corazón de piedra.

R: Por eso le debemos ayudar, vamos a usar un salón vacío y los encerraremos ahí, haremos una especie de juego del miedo, donde les haremos preguntas y así ella verá lo mucho que ama a John.

B: Remi haz tenido buenas ideas.

R: Lo sé.

B: La casa segura fue una de ellas.

R: Gracias.

B: Y has hecho un muy buen trabajo haciendo que funcione.

R: Gracias de nuevo.

B: Pero está es por mucho la peor idea que haz tenido.

R: Vamos ponle un poco de corazón a esto.

I: Blyke tiene razón Remi, no podemos hacer esto, además van a escapar pase lo que pase.

A: No si uso mi barrera.

R, B, y I: ¿Qué?

A: John y Serafina no tienen habilidades, prácticamente no pueden liberarse, además así los obligaremos a jugar.

R: Si si si si si, Isen tu puedes usar tu habilidad para detectar si mienten o no y cada mentira hará que Arlo achique su barrera.

B: Sigo estando en contra de todo esto.

A: No eres el unico, pero sabes que no la detendremos.

B: Llevo cinco meses sabiendo eso.

Decidimos ejecutar la operación Azúcar en el té, yo soy el encargado de buscar a John y traerlo aquí.

Oí que estaba en el patio dando vueltas como un perro persiguiendo su cola, vamos a averiguarlo.

J: Dios si en verdad existes dame una señal.

A: ¿Con quién hablas?

J: ...Dije una señal no un imbecil amarillo.

A: ¿Qué haces aquí afuera?

El camino a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora