Todo Por El

Extra. 3

Severus tenía muy en claro toda su vida , recordaba desde que tenía noción de tiempo , por eso , sabía perfectamente que nunca le festejaron algún cumpleaños , su madre le llegó a dar algun dulce sin que su padre se diera cuenta pero siempre terminaba sintiéndose culpable en lugar de feliz , pues sabía que ese dinero le haría falta a su madre.

Por eso , cuando regreso al departamento después de un largo día de trabajo y encontró a Sirius junto a sus amigos en la sala , con un gran pastel y algo de comida (obviamente comprada pues ninguno se metería a la cocina) no pudo evitar que sus ojos se llenarán de aquellas gotas saladas que le impedían seguir viendo con claridad.

— Oh..mi Sevi — susurro Sirius con una pequeña sonrisa en sus labios , ver a su novio conmovido era algo tan dulce — ¡Feliz cumpleaños mi amor!

— ¡Felicidades padrino! — un pequeño rubio corrió de entre las piernas de Regulus junto a un sonrojado azabache que sostenía su mano para no alejarse ni un poco de el — padrino ¿Por qué lloras?

Severus se agachó para quedar a la altura de los infantes que lo miraban con curiosidad pues jamás veian a ese hombre tan serio de aquella manera , el azabache fue el primero en acariciar sus mejillas húmedas por las lágrimas.

— Está bien llorar de vez en cuando , papá dice que mamá siempre decía que eso le daba descanso al corazón — la mirada tan llena de cariño del azabache hicieron que el corazón del pelinegro se estrujara un momento , tenia la misma mirada de su madre , de su adorada Lily.

— Y tu madre tenía toda la razón , Harry.

— Padrino — susurro el rubio entrelazando su mano libre con la del mencionado — papá y padre te han traído un gran pastel , el tío Sirius consiguió la comida.

— Se ve todo delicioso , vamos — ambos menores sonrieron antes de comenzar a jalarlo para que se acercara a los demás quienes sin perder tiempo comenzaron a felicitarlo , Sirius dejo su turno hasta el final.

Regulus y Lucius tenían una relación cercana al pelinegro y aún que en algún momento ambos llegaron a sentirse atraídos a el , ahora en el presente , le tenían un gran aprecio , Lucius permanecía tomando al menor por la cintura y este charlaba con el cumpleañero feliz de recibir atención de su esposo.

James y Sirius charlaban un poco alejados de la pareja , james seguia sin poder entablar una conversación con ellos desde el día que se casaron y perdió la oportunidad de estar con Regulus.

— ¿Entonces..?

— Lo hablamos y estuvo de acuerdo — contó Sirius con una sonrisa — está al tanto de por qué lo hago y se siente feliz por mi.

— Pensé que sus celos a Remus lo harían que se molestara — bromeo el azabache para después suspirar — Lily estaría realmente feliz de verlos juntos.

— Lamento mucho que las cosas pasarán así , hermano — con un apretón de hombro Sirius quiso transmitirle que estaba con él por cualquier cosa que necesitara , James sonrió.

— No pasa nada , ya va sanando la herida , Harry es feliz y entiende que su madre lo cuida desde el cielo , la hermana de Lily viene a verlo tres veces a la semana con su hijo — se encogio de hombros — al parecer extraña tanto como nosotros a Lily y quiere estar cerca de lo que más amo ella en vida.

— Me alegro.

La tarde fue movida en el departamento, los niños pedían jugar en equipos y los adultos no podían decir que no a esos dos traviesos por lo que , la noche llego en un abrir y cerrar de ojos.

Cuando el reloj marco las once de la noche , James quien era el último en aquella vivienda estaba cargando a un dormido azabache , listos para partir a casa.