¡Esto NO es Un Fanfiction! (TodoBaku)

Capítulo 19: Ciclos que se cierran

Bakugou juraba que era la primera vez que iba a comer en un sitio tan lujoso, a lo que se lamentó al venir vestido con zapatillas y camisa. Shoto ya lo esperaba en la mesa y, aunque vestía de una forma similar a Katsuki, el simple aura que emanaba el chico era suficiente como para que encajara en este entorno.

—Pensé que dijiste que estabas quebrado —mencionó Bakugou, contando en la cabeza la cantidad innecesaria de servicios dispuestos en la mesa.

—Déjame disfrutar un rato más de ser el hijo de un millonario ¿vale?

Todoroki dejó una bolsa de regalo en la mesa y se la entregó a Katsuki con un leve sonrojo.

—Feliz cumpleaños.

Bakugou le dedicó una mueca burlesca como agradecimiento y abrió el regalo, encontrándose con una botella metálica negra y una nota que decía: "Esta no tiene restos de chimichurri".

—Eres un imbécil. Ya me había olvidado....

—No me gusta deberle cosas a la gente —reiteró Shoto, tomando la carta—, entonces... ¿Qué quieres? Podemos pedir vino, aunque no se mucho acerca de viñas y...

Se detuvo porque Katsuki se puso de pie y salió disparado al baño para lavarse la cara, peinó todo el cabello hacia atrás y a su regreso Todoroki lo miraba confundido.

—Estoy bien con cualquier cosa —murmuró, escondiendo el rostro detrás de la carta. Demonios, había como más de veinte variedades de pasta.

Todoroki, bajó con delicadeza la carta de Bakugou y le desordenó el pelo de manera cariñosa, apretándole la nariz.

—Mejor.

Katsuki vio a la camarera que se acercaba a la mesa, se cruzó de brazos e hizo un leve mohín.

—¿Quieren ordenar? —preguntó la chica, sacando una libreta del delantal, mirando nerviosa a Todoroki.

—¿Eh? Sí, ¿Qué vino es bueno?

La chica comenzó a explicarle a Todoroki con entusiasmo las distintas cepas disponibles y Shoto la escuchó atento, mientras Bakugou trataba de descifrar ciertos ingredientes en las distintas preparaciones. Por ejemplo, seguía sin comprender la diferencia entre el queso ricota, cheddar, feta y parmesano, para él todo eran queso.

—Ese último y, para mí un salmón.

La camarera asintió, anotando el pedido con prisas—. Una consulta, usted es Todoroki Shoto, ¿verdad?

Shoto asintió con calma, desde el suceso en navidad que decidió dejar de maquillarse por completo y ya se acostumbró a las intervenciones en la calle.

—¡Oh! Era una gran fan tuya en preparatoria. ¡Me alegro de que estés bien!

Katsuki frunció el cejo y cerró la carta de golpe, observando a la chica que ni siquiera hacía un mínimo esfuerzo en ocultar la emoción en sus palabras. Todoroki lo vio de reojo y soltó un suspiro.

—Muchas gracias, bueno ahora para mi novio...

Bakugou dejó de ver a la camarera porque le dedicó una patada bajo la mesa a Shoto tan fuerte que la superficie tembló. Por la vergüenza ordenó lo primero que se le vino a la mente y la chica se apresuró a irse con ambas órdenes.

—¿Qué te ocurre?

—Pensé que no querías nada de celos, Kats~.

—¿Quién dijo una mierda de celos? —gruñó Katsuki, cruzándose de brazos—. No era necesario, mírala, la asustaste.

—Nah... creo que quien la espantó primero fuiste tú —río Todoroki, apoyándose con un brazo sobre la mesa—. Bueno, eso ya no importa.

—Ahora van a estar hablando todo el rato de nosotros...