Héroes /Kamijirou

Capitulo 21

Holiis no pensé que fuera a actualizar de nuevo antes de que termine el año, pero acá estoy. Les deseo muy feliz año nuevo, amo a cada persona que se pasa por esta historia a leer y comentar.

Espero les guste el capítulo. A decir verdad, es bastante diferente a como lo pensé. Y mas algo incluso que el anterior, siendo que me guardé escenas para el próximo cap de Jiro.

Pd: en la historia en un momento hago alusión a una Pijama, y es una que ocurre en las novelas ligeras de Schools Briefs, tomo 3 si no recuerdo mal. Sino pregunten en los comentarios y les doy contexto completo.

Disfruten♥️

Narra Jiro:

Okey okey okey okey okey okey okey okey okey okey okey okey.

¿Que había sido todo eso? ¿Que diablos acababa de pasar?

Agradecía no seguir en la habitación de Kaminari.

De hecho era mentira que había organizado con Momo para cenar.

O sea, siempre cenabamos juntas, pero no le había escrito para ir a buscarla ni para organizar nada.

Solo necesitaba una excusa para irme de allí. Con total urgencia.

Ni siquiera estar delante de un villano me generaba ganas de huir. Ahora mi cuerpo solo pensaba en correr.

No corría literalmente solo porque iba a atraer la atención, y porque temia la reprimienda de Iida si me veía.

Todo el trayecto en ascensor se me hizo eterno de forma exagerada.

No podía demorar tanto en subir dos pisos, mí Jack golpeaba impacientemente mi hombro como si no tuviera control sobre él.

Y para colmo en medio de cada piso me encontraba con otros compañeros porque todos estaban bajando al comedor debido a la hora.

Y debía intentar hablar con ellos como si no estuviera peleando porque mis neuronas funcionen correctamente.

Supongo que ahora compadezco un poco a Kaminari. Incluso deseaba poder apagar mis neuronas como él era capaz.

Al llegar al piso 4, las puertas se abrieron y me encontré con Uraraka, pero al menos agradecí que fuera ella y no Mina.

—Hola, Jiro ¿Bajas a comer?—me preguntó muy animada.

Probablemente fuera porque habría mochi de postre en el menú del día.

—Hola amiga, de hecho ahora estoy subiendo a buscar a Momo a su cuarto y luego vamos para allá.

Revise mi celular por última vez, justo a tiempo cuando llegaba el mensaje de Momo para confirmarme que estaba en su cuarto.

Suspiré de alivio, no soportaría bajar tan de inmediato luego de lo que ocurrió, pero tampoco me gustaba la idea de ir a meterme a mi cuarto o bajar a comer con los chicos sola.

Sobre todo si le había dicho a Kaminari y Kiri que nos guarden un lugar.

No lograba mirar a mi amigo a la cara.

En serio no podía, era como si la vergüenza hiciera que me pese la cabeza, y no podía levantarla para verlo.

Y no podía ver esos ojos eléctricos que vi brillar a un suspiro de mí como si fuera lo mas normal del mundo ahora.

Si alguien podía hacer que mi cabeza baje de nuevo hacía la tierra y me tranquilice, entonces esa era Momo.

Primero, necesitaba poder contarle lo que ocurrió recién antes de bajar y volver a ver a Kaminari.