Capitulo 7

296 22 26
                                    

Narra Jiro:

Tarde un buen rato en dormirme, no podía parar de pensar en todo lo que me contó Kaminari.

Me sentía... Ni siquiera sabía explicar bien como.

Por un lado (un poco egoísta), estaba feliz de haberme ganado un poco de la confianza de Kaminari. Me sentía bien conmigo misma por haber sido capaz se ayudarlo aunque sea un poco.

De cierta forma, saber que alguien pudo llorar sobre tu hombro (en mi caso,  metafórica y literalmente) se siente bien. Me genera una sensación de cercanía que no tenía antes con él, y también intenciones de poder seguirlo apoyando en todo lo que pueda.

Pero por otro lado, no es lindo ver a un amigo llorar, conocer todos esos pensamientos horribles que tenía en la cabeza. Ahora era consiente de una parte importante de lo que estaba viviendo Kaminari y que no se irían con una charla o con un poco de apoyo.

Realmente me destrozó escuchar como se menospreciaba a si mismo, y a la vez me sentía muy identificada ¿Cuantas veces me habré dicho cosas parecidas?

Y también por experiencia propia, se que esos pensamientos y sentimientos no se van de la noche a la mañana y menos por una charla, por muy liberador que pueda ser hacer catarsis con alguien.

Lamentablemente, las cosas no son tan sencillas como hablarlas con un amigo y, listo, como nuevo.

El mundo entero sería mas facil si fuera así la ecuación. Pero no, ni siquiera hay una solución clara para afrontar esa clase de situaciones: ¿Acostumbrarse? ¿Aprender a vivir con ella? ¿Olvidarlas y reprimirlas? ¿Aprender de ellas?

Al fin y al cabo, un trauma es un trauma, con toda la complejidad y la carga emocional que eso conlleva. Y por lógica, no es tan fácil de solucionar.

No es como ir con Recovery Girl por una pierna rota.

De hecho, la asistencia psicología para los héroes en Japón, de por si es bastante olvidada. Y nosotros como estudiantes a héroes, tampoco teníamos una preparación psicológica para afrontar mejor las circunstancias atroces y horribles que uno puede presenciar siendo héroe.

Se siente como un enorme "¿Problemas emocionales? Oh no no, eso no es de Héroes".
Es decir, un asco. Como si por ignorarlo, el factor psicológico que pesa sobre la profesión no existiera.

Intenté despistarme un poco con el celular, pero mi cabeza siempre volvía a Kaminari llorando. Una imagen que si me la decía alguien hace un par de meses, seguro la tacharia de imposible.

Siempre con sus sonrisas y chistes; Su forma tan sociable y despreocupada de actuar; Su forma de aliviar el ambiente con alguna estupidez.

Incluso habiendo notado ya hace un tiempo que él estaba raro, era un contraste absolutamente abrupto.

También me hubiera gustado poder decirle algo mas que solo las mismas frases clichés, como "no es tu culpa" o "está bien, no pasa nada". Algo diferente, que realmente sirva. Me ofrecí a escucharlo, sin cuestionarme que tan preparada estaba yo para hacerlo ¿Era la persona idónea para eso?

Y sobre todo, me hubiera gustado poder contenerlo mas. 

Me enoja de mi misma que suelo ser tan ajena al contacto físico, que me costó el responderle. Debería haberlo abrazado o al menos haberle podido dar algo del contacto humano que obviamente estaba buscando. Pero me sentía un poco como un tronco.

Lamentaba no haber podido hacer mas, pero algo me decía que no sería la última situación parecida que viviría junto con Kaminari.

Me reí en la soledad de mi cuarto al pensar en ello. Hasta hace unos días, las palabras "amiga de Kaminari" me sonaban algo extrañas, pero ahora que lo había visto llorar, realmente me sentía unida.

Héroes /KamijirouWo Geschichten leben. Entdecke jetzt