Stirlyng [BORRADOR]

Capitulo 43

1:Se me olvidó que tenía que actualizar este libro 🤡

2: No quiero insultos hacia los Stirlyng en este capítulo plis. Para el señor Stirlyng tal vez si pero para los niños no, seas un poquito compasivas

3: Ahora si buenas noches y adelante  producción *Pone música trágica dramática*

Eros Stirlyng

Unas horas después del partido

Nos dejó.

Ella no puede dejarnos

No puede

¿O si?

Me mantengo detrás de Hades mientras el golpea el celular una y otra vez contra la encimera.

Las palabras de Giana se repiten una y otra vez en mi cabeza como un vídeo rayado

La hemos cagado.

Y esto ya me hace sentir cansado, sobre toda esta situación

–Vamos–Dice mi hermano luego de mucho con la respiración acelerada.

Veo como pasa por mi lado y suspiro para subir a mi habitación y colocarme unos pantalones junto a un jersey.

Cuando salimos del departamento vamos en silencio, el auto se mueve hacia la casa de nuestros padres y al llegar bajamos

Miro la inmensa mansión frente a mi y un sabor amargo aparece en mi garganta al recordar cómo pensaba  traer a Giana aquí

Quería que conociera a mis padres

Cuando nos adentramos, la luz que suelta la lámpara del techo me hace cerrar los ojos de golpe por la irritación.

–Bienvenidos señores–Una empleada se acerca pidiendo el abrigo de mi hermano

–¿Donde están?

–Cenando señor, llegan justo a tiempo–Con un último suspiro sigo a mi hermano como un automata.

Veo el cuadro familiar en dónde aparecemos, mi padre abrazando a nuestras madres y siento que esos pudimos ser nosotros con Giana

Oh al menos eso nos dijo nuestro padre, que nosotros seríamos así con Giana

Las inmensas puerta del comedor se abren y las risas escandalosas de nuestras madres hacen que un calor reconfortante llegue a mi pecho

–Y entonces le dije ¡¿Cómo se te ocurre meter una nutria a su casa!? Y me contestó con ¡Es que la escuche decir que eran lindas!

Papá termina de hablar y mi madre Lizzie se ríe mientras su cara está todo roja y nuestra otra madre, Rachel niega con su risa escandalosa