Volando con Patan

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Dalla

Mi abuelo decía que un nuevo día es un nuevo capitulo en nuestra vida y cada paso que damos es un paso que nos acerca a nuestro destino. Pues este capitulo en mi vida comenzó con Patán a escasos centímetros de mi cara, al principio me asustó y me hizo reaccionar golpeándolo en la cara, lo que luego me hizo arepentirme, su dragón se acerco a mi para protejer a su jinete pero cuando vio que lo estaba ayudando se alejo de mi.

Con el golpe que le di, Patán cayo de espaldas, gatie hasta donde estaba y sostube su cabeza sobre mis piernas preocupada por que no fuera a reaccionar.

-Patán, Patán estas bien-le dije-vamos reacciona.

-Tal vez un beso ayudaría-dijo abriendo un solo ojo.

Me molesto mucho que fingiera haberse desmallado, me preocupó enserio verlo así. Cuando me di cuenta de que finjia lo empuje y me levante para salir de la jaula.

Con el alboroto de Patán, Chimuelo despertó, bostezo y se levanto para irse sabrá Thor a donde. Pero se despidió de mi lamiendo mi mano.

-Probablemente va a buscar a Hipo-dijo Patapez, no me había dado cuenta de que estaba con nosotros.

Justo cuando Chimuelo salio por la puerta de la academia llego un cremallerus verde con sus jinetes, eran un chico y una chica, ambos rubios y de cabello largo casi idénticos. Bajaron del dragón y se dirigieron a mi.

-Hola, bonita-me dijo el chico-me recuerdas, te acabo de llamar la bonita.

Mi primera imprecion de ellos fue que eran unos tontos, pero no debo dejarme llevar por las apariencias, ellos no se dejaron llevar por mi apariencia. Además eran jinetes, debían tener habilidades para poder montar un dragón.

-Disculpa a mi hermano-dijo la chica dándole un golpe en el casco-es un tonto.

Después de recibir ese golpe, el chico le regreso otro a su hermana y comenzaron a pelear.

-Son Brutacio y Brutilda-me dijo Parapez mientras los veíamos pelear-son los gemelos. Siempre se comportan así.

Fua bueno saberlo, ya me estaba preocupando que se estuvieran peleando tanto.

Me di la vuelta para evitar verlos pelear cuando vi que Patán estaba revisando mi bolsa, olvide que la había dejado en la jaula, el saco un paquete de algas que era lo único que podía llevar en mi viaje, no se echaban a perder y aunque no sabían muy bien eran comida, lo lanzo y volvió a buscar en mi bolsa. No le di mucha importancia a las algas pero cuando saco la peineta de mi madre me puse furiosa.

-Patán-le grie furiosa acercandome a el-debuelveme eso.

-Es muy lindo-dijo jugando con la peineta-tal vez me lo quede.

Me puse fuirosa y me acerque a el lanzando pequeñas llamas por la boca, no podía evitarlo, al verme salió corriendo y obvio que lo persegui por todos lados. Los gemelos al vernos dejaron de pelear, nos vieron y se burlaron de Patán. El me llevaba ventaja, normalmente soy veloz pero con un ala rota y una tablilla mi equilibrio me hacia lenta, después de unas vueltas me tropece y caí al suelo, el golpe me libero las lágrimas y no pude levantarme.

-Patán, por favor-le dije entre lágrimas-es la peineta de mi madre, es lo único que me queda de ella.

-Tu perdiste a tu madre-dijo Brutacio a lo cual asenti.

-Como Hipo-dijo Bruthilda yo volví a asentir.

Patapez fue muy amable, de nuevo, le arrebato a Patán mi peineta y me la acomodo en el cabello sentandose frente a mi, es muy sentimental por que también tenia lágrimas en los ojos. No pude evitarlo y lo abrace, después su dragón se acerco y me lamio la cara intentando consolarme, yo la abrace también. Patán intento unirse a los abrazos pero el dragón de Patapez le gruño y el entendio la indirecta "no te le acerces, tu causaste esto". Ahora que lo veo bien, Patán es mas desesperante que cualquiera a quien allá conocido.

Después de unos minutos abrazando a la dragona me levante y les pregunte por Hipo, Patapez dijo que lo vio irse al pueblo, nunca había estado en un pueblo de hombres y no estaba entuciasmada por ir, pero si quería hablar con Hipo tenía que hacerlo.

Todos se ofrecieron a llevarme a la aldea, pero solo acepte el ofrecimiento de Patapez, Gorgontua era lenta pero de fiar y eso era suficiente para mi. Me subi al dragón y me sugete de los hombros de Patapez, salimos lentamente de la academia de dragones y volamos con tranquilidad hacia el pueblo, o eso creí, cuando el dragón de Patán me tomo con sus garras y me lanzo por los aires para atraparme después de una aterradora caída, creí que moriría, nunca antes había estado en una caída libre sin la posibilidad de levantrme en vuelo yo misma. Me acomode en la silla de Patán y lo abrace con fuerza para no caerme.

-Todas aman a Patán Mocoso-dijo riéndose.

No podía ni hablar y para acabar el dragón no confiaba en mi e iba dando vueltas por el aire y haciendo piruetas hasta que llegamos a la aldea y aterrizo en la plaza principal, un lugar amplio donde había algunas carretas con cosas y algunos vikingos. Una de las casas que habían algo lejos de donde aterrizamos tenia un enorme diente colgado afuera y hay estaba el vikingo con el garfio en la mano que me puso la tablilla en el ala, pero tambien estaba Hipo y la rubia que me había defendido, quería hablar con ellos pero tenia nauceas horribles y estaba muy mareada. En cuanto el dragón tocó el suelo intente bajar pero me caí de rodillas, Patán intento que me levantara pero yo no podía.

-Sueltame-le grite empujandolo y cubriendome la boca con una mano-voy a vomitar.

Media sangre de dragon (HipoxDalla)Where stories live. Discover now