°•Seremos Familia•°

•Capítulo 10•

No sabia cuántas horas habían pasado...

Solo sentía el frío viento chocar con mi cuerpo...

Mi cabeza comenzaba a doler un poco, por el llanto que había cesado hace algunos minutos...

No deseaba levantarme...

Solo quedarme ahí alejado de todo lo demás...

Pero entonces algo paso...

No sé bien como, pero mi cuerpo se encontraba sobre la copa del árbol en el que estaba.

Abrí los ojos sorprendido, y al ver hacia abajo pude apreciar como dos cuchillos se encontraban clavados dónde estaba, mire hacia los lados y entonces los ví.

Toga y Dabi estaban a unos pocos metros de ahí, y apenas nuestras mirada de encontraron Dabi me lanzó una llamarada, active el O.F.A. al 20% y logré esquivarla bajando al suelo, pero entonces sentí como un cuchillo se clavaba en mi pierna, a lo cual solté un leve jadeo de dolor.

-Izuku-kun~, no te resistas solo queremos que vengas con nosotros~-Dijo Toga mientras se me acercaba nuevamente, pude notar que en una de sus manos traía una jeringa, probablemente con un sedante.

Comencé a retroceder mientras esquivaba los cuchillos de Toga y evitaba que me clavara esa jeringa, a los pocos segundos Dabi también comenzó a lanzarme llamaradas.

Las esquivaba lo mejor que podía pero en un mal movimiento cuando esquivé una gran llamarada que iba hacia mi brazo derecho, recibí uno de los cuchillos de Toga en mi estómago, logrando que me quedara quieto algunos segundos por la sorpresa, mas no duró mucho ya que inmediatamente otros cuchillos vinieron hacia mi y tuve que esquivarlos ocultando me detrás de un árbol.

Sabía que necesitaba un plan, ya que a pesar de que la herida no se veía mortal, estaba comenzando a sangrar considerablemente y sumándole mi cansancio era claro que no duraría mucho más así, entonces se me ocurrió algo.

Si lograba causar algún tipo de explosión que llamara la atención los héroes vendrían a ayudarme, no estaba seguro de si llegarían a tiempo pero era la mejor opción que tenía.

Seguí esquivando los ataques de Toga pero note que las llamas de Dabi eran más débiles que las anteriores, pero atacaba más seguido, entonces puse en marcha mi plan.

Me impulse unos 20 metros con el 40% de O.F.A. y al comenzar a descender use el látigo negro para tomar los cuchillos de Toga mientras esquivaba las llamaradas.

Al aterrizar logré mi propósito, creando un gran cráter y que al menos dos árboles se derrumbaran, al mismo tiempo cree una gran nube de polvo, aprovechando esto para ocultar me entre las hojas de un árbol.

Cuando desapareció el polvo ví que tanto Toga cómo Dabi comenzaron a buscarme por los alrededores, yo trate de hacer el menor ruido posible pero el dolor de las heridas no me lo hacía fácil, aún tenía el cuchillo en el estómago, ya que, tenía miedo de que al quitarme lo me desangrara con mayor rapidez, pero sabía que no podia dejarlo ahí por mucho más tiempo.

El hecho de que comenzará a ver borroso me lo confirmaba, trate de mantenerme enfocado, no sabía en qué momento podrían llegar a atacarme, entonces sentí un peso extra en las ramas donde estaba, y al darme la vuelta ví a Toga corriendo hacia mi con la jeringa, la única opción que tuve en ese momento fue tirarme hacia abajo, pero al hacerlo Dabi me esperaba abajo, me tomo los brazos por la espalda logrando inmovilizar me por lo débil que estaba en ese momento, luego Toga bajo del árbol y me inyectó el sedante.

Trataba de mantenerme consciente, sabía que si llegaba a rendirme, lo más seguro es que me encontrarán sin vida, entonces las palabras de Kota vinieron de nuevo a mi