Después de dos horas intensas de matematicas Sobre como sacar la tangente y eso.
Nos dirijimos a química con el señor Luis. Después de esas otras dos horas, era tiempo del receso y de saber acerca de el "favor" de Antonio.
Mientras el profesor explicaba el significado de la química, las dudas giraban a mi al rededor.
(...)
Al fin había transcurrido el tiempo y cuando dio el timbre al primero que mire salir fue a Antonio y yo lo seguía. Antes de salir me di cuenta que Vio me buscaba, pero ya había salido, después buscaría a Vio para preguntarle que quería.
Llegue y Antonio estaba de espaldas. Se miraba nervioso y algo tenso.
Quise relajarlo así que llegue de sorpresa y le tape los ojos.
—¿Vio?. Pregunto extrañado y esperanzado.
—¿Vio? Pregunte extrañada. Según yo me querías ver. Continúe.
—Avalon, perdón, si a ti quería verte, es que estaba pensado en Violeta. Dijo un poco avergonzado.
—Es sobre Vio de quien me quieres pedir el favor ¿verdad?. Pregunte emocionada.
—si. Supiro. Avalon Bren estoy enamorado de tu mejor amiga la señorita Violeta Cazarez; y siendo así quiero pedirte que ayudes a enamorarla. Continuo un poco nervioso
—HA!!! grite de emoción. Claro que si.
No sabia si decirle que el también le gustaba a violeta.
—pero y ¿si no le gusto y me desprecia?. Pregunto aterrado.
—claro que no al contrario, pero si no luchas por ella veras.
En ese momento me abrazo y mientras me agradecía por ayudarle se escucho un ruido.
—Avalon. Escuche gritar, era Violeta con los ojos llenos de lágrimas.
—Vio, cariño no es lo que piensas dejame explicarte. Dije suplicantemente.
—¿Explicarme qué? Que eres novia del chico que hace apenas un par de días te confese que me gustaba. Dijo con lágrimas en los ojos.
Al oír la confesión de violeta, Antonio no sabia si brincar de la emoción o hacer algo para explicarle a Vio y no pudo evitar que una sonrisa se le formara en el rostro.
— No violeta, al contra.....
No me dejo terminar porque salio de la biblioteca azotando la puerta.
—Ve por ella. Le dije a a Tony señalándole la puerta mientras la bibliotecaria anciona miraba con atención aquel acto.
Sin mas Antonio salio de ahí corriendo detrás de Violeta.
NARRA ANTONIO.
salí corriendo de ahí después de que Avalon me aconsejo que lo hiciera.
después de tanto correr alcance a Violeta.
—Vio, vio, escucha. Dije con voz agitada.
—¿Qué quieres? Dijo llorando. No necesito de tu lastima. Continuo diciendo.
—No es lastima, lo que acabas de ver no es lo que piensas. Dije mas calmado.
—No quiero escucharte "Antonio". Me dijo Antonio y ella nunca lo hacia. Después de decir eso siguió caminando.
Narra Avalon.
Mire que estaba hablando cuando ella siguio caminado.
Alcance a Tony y me contó lo que paso. Me sentía muy mal por lo que Violeta estaba pensando.
—Antonio, como acabas de ver creo que tu y yo ya no podremos hablar mas, al menos hasta que se aclaren las cosas con Vio.
—Avalon, claro que no, no por un mal entendido vamos a dejar de hablar, además te necesitó para que me ayudes a conquistar a Vio.
Estubimos hablando sobre el tema y Antonio insitia que no y yo que si, valla que eramos tercos. Al fin de cuentas me moleste y lo deje hablando solo.
Transcurrían las clases como de costumbre, la única diferencia era que Violeta no me hablaba. Le ponía sonrisas y ella me devolbia muecas, le mandaba notas y las arrugaba sin siquiera leerlas.
Salimos de clase y recordé que mamá me dijo que papá vendría por mi, pero el tiempo pasaba y no llegaba. De pronto escuche un pitido, levante la cabeza pensando que era papá, pero cuando mire era Antonio, ¿qué quería? Por suerte Vio ya se había hizo.
—Subete. Me grito sacandome de mis pensamientos al parecer sus papás le habían regalado un auto y ya no venían por el.
—¿Estas loco? No subiré contigo, además nisiquera se como manejas. Le dije.
—jajajaja Avalon, se mucho mas que tu, ya tengo tiempo en esto. Respondió con un tono burlesco.
—Como sea Antonio no subi......
No me dejo terminar la frase, cundo me tomo por el brazo y me subio al jetta clásico.
—Antonio bajame o gritaré como loca. Amenaze, pero al le valió y le dio al carro.
—Bajeme o me tirare. Volví a amenzar.
—Ya Avalon, sabemos que no te animas. Respondió.
No me quedo mas callarme, así me fui todo el camino hasta que llegamos y sin despedirme me baje.
Al parecer Vio hiba a caminar cuando pasaba por mi casa mientras me bajaba.
—Vio, debes escucharme. Le dije después de que Antonio se había hido.
—¿Qué quieres? ¿Decirme que tu nuevo novio te trae a casa? Sabes que no me digas nada, mejor escucha. Avalon Bren me dedicare lo que nos queda de ciclo y si te vuelvo a ver a joderte tu miserable vida. Me dijo ella, con un tono que nunca había escuchado en ella.
Sin mas nada que decir siguió su camino.
Me metí a casa y ahí estaban mis padres.
—Hija, perdón por dejarte plantada, pero mira todo lo que traje de Monterrey. Me dijo mi padre.
Estaba tan enojada que tome las bolsas, lo mire a los ojos y las tire al piso y empecé a gritar —¿Crees que con tus malditos regalos vas a llenar el vacío que dejas tu y mi madre? Estaba tan enojada que estaba dispuesta a gritar todo lo que traía guardado.
