Renacer con Talento en Naruto [1]

Capítulo 156 - Pakura (2)

Y después de pasar por varios escenarios, el hombre finalmente llegó al quid de la situación.

"¡Mierda! ¡Tendré que informarle esto a Mizukage! ¡Estoy tan muerto!"

No hace falta decir que Suicide Squad casi ganó un nuevo miembro ese día.

...

Rei se sentó junto a la cama de Pakura, leyendo tranquilamente Icha Icha Paradise. Naturalmente, lo leyó por la trama, no por la obscenidad. Ya tenía suficiente obscenidad en casa, después de todo... ¿Verdad?

'¡Dios, si tan solo no fuera tan aburrido, estar sentado aquí y esperar a que ella se despertara!' Se quejó mentalmente.

Honestamente, Pakura estaba demasiado cerca de la muerte cuando Rei logró llevarla a Tsunade. La mujer ya había perdido una cantidad de sangre casi letal, y si no fuera una ninja, estaría a seis pies bajo media hora antes de que Rei la alcanzara. Por ejemplo, incluso Tsunade tardó horas en volver a unir la pierna correctamente.

Hoy fue el tercer día que Pakura mintió en el hospital recién establecido en Uzushio. Claro, podría haber sido culpa de Rei que se olvidara de ella, pero en su defensa, Pakura debería haber sido enviada a Kirigakure solo después de que Yagura se convirtiera en el Mizukage y, sin embargo... aquí estaba ella.

'Parece que el efecto mariposa es realmente una cosa', Rei suspiró para sus adentros, 'Qué... problemático.' Pensó, pasando la página de su libro. Solo con el rabillo del ojo notó que Pakura se movía sutilmente.

Lentamente abrió los ojos y Rei notó con alabanza que había levantado la guardia incluso antes de hacerlo. Con los ojos finalmente abiertos, Pakura rápidamente observó la habitación en la que se encontraba...

"Te felicitaré por ser cuidadoso. Soy Rei y te salvé... bueno, deberías poder recordar esa parte". Rei dijo arrastrando las palabras antes de que la mujer pudiera llegar a alguna conclusión equivocada.

Pakura se movió, encontró la parte superior de su cuerpo desnuda, solo cubierta con vendajes, y rápidamente levantó la sábana, lo que provocó que Rei sonriera ante lo tímida que era la mujer supuestamente más dura de la generación más joven de Sunagakure.

"¿Dónde estoy?" preguntó Pakura, su tono bajo y mesurado, incluso cauteloso.

'Oho ~, definitivamente está probando mentalmente su cuerpo y sus músculos mientras busca rutas de escape'. Rei sonrió al ver cómo sus ojos parpadeaban casi imperceptiblemente de un lado a otro a veces.

"Uzushio... eso no es importante." Rei agitó con desdén el libro Icha Icha hacia ella de una manera tonta, haciendo que se relajara mientras la distraía: "Lo importante es que tengo una oferta para ti desde que Suna te traicionó, lo que te da solo dos opciones. Puedes morir como Sunagakure y el deseo de Kazekage o puedes volverte rebelde. En caso de que decidas volverte rebelde, nosotros, Yozora, posiblemente podríamos encontrar un lugar para ti. Si eliges la primera opción, por lo menos matate en algún lugar lejos de las sábanas. "

Pakura solo pudo asentir tontamente hacia él. Ella... se quedó sin palabras por un momento.

"Uh..." Ella resumió coherentemente sus sentimientos antes de sacudir la cabeza para salir del aturdimiento, "Así que... er, yo... me estás ofreciendo", se señaló a sí misma con desconcierto, "una oportunidad". unirse a Yozora? ¿El mismo Yozora que enfureció por completo a cuatro de las cinco principales aldeas ninja? ¿El mismo Yozora que podía infiltrarse en cualquier aldea que quisieran? Yozora... ¿la organización ninja rebelde que tiene tres rangos SS? Cuanto más hablaba, más extraña se volvía la mirada de Rei.

"Hm... no sabía que somos tan famosos. ¿En pocas palabras? Sí, puedes unirte". Rei sintió el impulso de acariciarle la cabeza debido a lo linda que se veía su expresión de incredulidad, pero él se contuvo. Kunoichi y todo ese funk... quién sabe si no perdería la mano si intentara tocar su cabeza sin advertirla primero. "Honestamente, tenía mis ojos en ti desde hace un tiempo", dijo Rei, lo que hizo que Pakura entrecerrara los ojos un poco y retrocediera un poco. Especialmente desde que vio el Libro Icha Icha en sus manos. "y no, yo no orquesté esto ni soy una especie de pervertido de armario". Se encogió de hombros sin preocuparse, "De todos modos, te hice marcar con un sello localizador. La única razón por la que llegué tarde para salvarte fue lo inesperada que fue la situación".

'Realmente no puedo decirle que llegué tarde porque Tsunade no me dejó salir de la cama, ¿verdad? Meh... fue inesperado que la enviaran a Kirigakure tan temprano. ¡Verdades a medias por la victoria! Rei vitoreó por dentro. 'Ahora... esperemos que nunca pida la descripción completa de las funciones del Sello Localizador. Se quedó completamente paralizada antes de desmayarse, ¿así que tal vez? Nah... No voy a abrir esa lata de gusanos.'

"Tengo tantas preguntas que no tengo ni idea de por dónde empezar". Pakura comenzó, completamente perdida. No tenía idea de qué hacer en esta situación.

'Uh, oh...' Rei, como instintivamente, le arrojó el libro que sostenía, haciendo que ella lo atrapara por reflejo.

"Léalo. La trama está bien, la obscenidad es de segunda clase y creo que estoy siendo generoso, y al final completo del libro, escribí información básica sobre Yozora y lo que querría de ti si te unes y qué Te estoy ofreciendo a cambio". Rei explicó, sin siquiera darle la oportunidad de hacer sus preguntas, antes de levantarse de su silla. "Mañana hablaremos de eso. Asegúrate de pensarlo bien".

Y con eso, Rei salió de la habitación, dejando a la mujer estupefacta con sus propios recursos. Llamó a este movimiento una retirada táctica definitiva.

La puerta se cerró después de que Rei salió de la habitación y los hombros de Pakura se hundieron instantáneamente, el borde de la sábana se deslizó de las manos de Pakura, exponiendo su cuerpo vendado mientras las lágrimas comenzaban a rodar por sus mejillas mientras su mano inconscientemente frotaba el lugar donde le cortaron la pierna como para confirmar que esto realmente estaba sucediendo. Pakura dejó que su cuerpo volviera a caer sobre la suave cama, los sollozos escapaban de sus labios mientras su mano libre trabajaba duro para limpiar los ríos de lágrimas de felicidad cuando su cerebro finalmente registró lo cerca que estaba de...

"Todavía estoy vivo." El rostro de Pakura floreció en una hermosa sonrisa, sus ojos girando hacia la puerta cerrada con sincera gratitud en ellos, "¡Muchas gracias!"