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*A veces ocurre, la persona que amas deja de estar ahi para ti.

No podemos parar esto, su olor inunda nuestra fosas y los recuerdos nuestra mente, recordando todas aquellas mañanas, tardes y noches en las que nuestro amor traspasaba la realidad, creando inolvidables memorias que no nos dejarán hasta abandonar este mundo.

Pero aveces esa persona se va. Tú no tienes la culpa de nada, simplemente tienes que armarte de valor y aprender a decir, adiós..*

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Una semana había transcurrido desde aquella innovadora colección que dio inicio a un incómodo ambiente entre los cónyuges, Beatriz a toda costa comenzó a evitar a su esposo, situación que no paso desapercibida por los empleados de la compañia que empezaron a especular sobre un posible divorcio o infidelidad por parte del castaño, igual la gran mayoría de ellos prefirieron mantener los comentarios en su núcleo personal.

Las cenas, "charlas de descubrimiento" o la buena convivencia que ambos mantuvieron por aproximados dos meses tanto fuera como dentro de Ecomoda se vieron negadas por Beatriz que comenzó a frecuentar la casa de sus padres más de lo normal con el pretexto de extrañarnos, todo esto con la excusa de evitar la presencia del Valencia; Daniel no tenía más remedio que callarse, el escándalo no era úna opción valida y aún más considerando los términos de su matrimonio conyugal.

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El día se encontraba despejado y "caluroso"; claro considerando el gélido clima que normalmente habita Bogotá, las calles eran normalmente transitadas y los ejecutivos y demás empleados de la compañía se encontraban ya en sus puestos de trabajo, a excepción de Marcela que brillaba por su ausencia a su amado puesto, llamando a las horas de la mañana a su amiga y secretaria Patricia Fernández, pidiéndole aplazara sus reuniones del día, despejará su agenda y se comunicará con Maria Beatriz para cancelar el almuerzo que llevarían a cabo este día, junto a pedirle total discreción sobré su deteriorada salud física y mental el día de hoy e invebtara una creíble excusa sobre su ausencia.

En cambio aquella exorbitante mujer siguió su "instinto" protector, concluyendo la llamada con su amiga, jefe y gerente de puntos de ventas, levantándose de su asiento, acomodando su falda, blusa y finalmente su cabello en un exagerado movimiento que llamo la atención de las secretarias y asistente, ocasionando en que detuvieran su trabajo para prestar atenta atención en sus movimientos, observando como la peliteñida sin previo aviso abría la oficina del Doctor Valencia que reto tal acto pidiéndole en un tono grotesco y elevado saliera de la sala o ingresará como una persona civilizada.

- Daniel, dijo Patricia alargando aquel nombre con un tono agudo en su voz, nesecito que me lleves o me prestes tu chofer, cerro la puerta tras de si no sin antes dirigirle una mirada cargada de superioridad a Aura María que arrugó el ceño, Marcela está muyyy enferma, exagero sus palabras, levantó una de sus manos apoyada sobre su brazo izquierdo, casi al borde la muerte y nesecita alguien que la cuide y le dé apoyo emocional, plasmó un rostro lleno de "desgracia", tu sabes Daniel que hace un año ella y la fiera de Armando iban a casarse y está desolada .... Por favor Daniel, le rogó sonriendo de medio lado, dame el permiso ... y puedes ayudarme hablando con la Doctora Betty para que no me descuente el día ... Igual voy a ir a cuidar a su cuñada y te avise a ti, posó un puchero.

- No, se levantó Daniel de manera calmada de su escritorio, tomando entre sus manos su maletín y guardando allí mismo algunos papeles que mantenía minutos antes reposados sobre el escritorio, no tiene que sacrificar su valioso tiempo laboral para ir a cuidar a mi hermana, enfatizó su parentesco, perfectamente podemos hacerlo Beatriz y yo, le agradezco su preocupación por Marcela, pero enserio ya retirese a su puesto de trabajo, señaló la puerta y se dispuso a apagar el computador que se le fue asignado, tomando las llaves y cerrando la puerta tras de si, dirigido a la oficina de presidencia disponiendo de su presencia allí mismo y comenzar a hablar, en cambio encontrándose con una "tierna" escena que era protagonizada por Inecita, Doña julia y Beatríz, las Pinzón Solano sentadas sobre el cómodo sofá café y la anciana en el asiento correspondiente a la presidenta, cada una con unas agujas crochet entre las manos en lo que lógicamente parecía tejiendo, ingresando a la oficina, carraspeando su garganta, saludando primeramente a la costurera con un suave beso en la mejilla derecha y un cumplido, seguido a su suegra la cual llegó a una hora desconocida y por último a su esposa que posó una mueca a su vista nada agradable, con la intención de levantarse pero siendo agarrada de manera fuerte por sus manos sobre sus hombros contra el sofá y presionando sus labios sobre los de ella, siendo recibidos al principio con renuencia y al final de manera "agradable", obligados a separarse luego de que un alarmante carraspeo resonara al fondo de la oficina volteando su vista y encontrándose con el padre de la morena, acompañado con su típica cara de pocos amigos, golpeando sobre una de sus manos el periódico diario y ajustando su traje.

Nuestro Casamiento (Betty X Daniel) Ysblf "Danitriz"Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt