Capítulo 94

1K 118 708
                                    

Mark sentía su corazón latir completamente acelerado, aferrándose a Johnny, a la espera de que su sueño pudiese extenderse por más tiempo y no perder a su esposo de nuevo. Necesitaba aprovechar cada momento, tocándolo, besándolo, sin embargo, el miedo volvió a atacarlo al creer que pronto despertaría solo en esa cama y estaba seguro de que no podría soportarlo.

—Por favor, no llores más —susurró Johnny, secándole las lágrimas suavemente y llenando su rostro de besos a la vez que Mark negaba con la cabeza.

—N-no quiero que te vayas, quiero tenerte aquí —jadeó, agarrando desesperadamente el pijama de Johnny, y tomando sus labios para después enredar los dedos en sus largos cabellos, llenándose del olor de su crema de afeitar y su jabón de baño, preguntándose por qué todo se sentía tan real.

—Me tienes aquí, no voy a irme —aseguró su esposo.

—Estás mintiendo, cuando yo despierte... —se detuvo cuando Johnny sonrió, haciendo pedazos todo su cuerpo porque nunca le había visto sonreír de una manera tan hermosa y compasiva.

—Esto no es un sueño, Mark, estoy aquí, contigo y no planeo volver a dejarte solo —manifestó—. Realmente lo lamento demasiado.

Mark se quedó mirándolo en silencio, con sus pupilas temblando tanto como su labio inferior.

—¿No vas a preguntarme qué de todo lamento? —inquirió Johnny, acariciándole el rostro y llevando hacia atrás sus cabellos para poder ver sus brillantes ojos.

Mark soltó una lenta exhalación y luego volvió a arrojarse sobre él, para besarlo desesperado, enseñándole ese conjunto de sentimientos que había guardado dentro de sí. Tomando sus labios sin tener que fingir que no era algo que realmente deseaba, sintiéndose correspondido, como nunca antes esperó volver a sentirse.

—Te extrañé demasiado —musitó sobre sus labios mientras Johnny le miraba fijamente, con sus ojos repletos de lágrimas y asentía arrepentido.

—Yo también lo hice, no podía sacarte de mi cabeza día y noche. Sé que estoy siendo egoísta, sin embargo, no soy capaz de vivir sin ti, no puedo aceptar que estás pasando por tantas cosas y yo no esté para ayudarte o consolarte. Me arrepiento de haber tardado tanto —se detuvo, tragando con fuerza y haciéndosele imposible alejar sus manos de él—. Cuando la abuela y Nathalie se marcharon, me di cuenta de lo que estaba haciendo y de lo mucho que tengo que aprender de ti, te necesito demasiado, Mark Lee.

Mark se abrazó a él entusiasmado, negando con la cabeza muchas veces.

—No puedo creer que esto sea cierto —comentó con una enorme sonrisa.

—Debes creerlo. ¿Recuerdas lo que me dijiste la última vez que nos vimos? —indagó Johnny—. Me dijiste: "si regresas, entenderé que quieres un reinicio de todo esto" —repitió porque lo tenía grabado en su mente—, y realmente lo deseo, lo necesito desesperadamente y espero que no sea demasiado tarde para hacerlo.

Mark exhaló, apretando los labios para no ponerse a llorar.

—No es tarde para hacerlo, te extrañaba mucho, John —musitó—. Quería ser sincero contigo, contarte cómo me siento, escucharte, que me escucharas... quería tantas cosas —añadió y luego negó con su cabeza—. Las sigo queriendo, así que debes hacerte responsable.

Johnny asintió, dándole un beso en los labios que no extendió demasiado.

—Ahora, bájate, por favor —comentó y Mark se dio cuenta de que se encontraba encima de Johnny, advirtiendo algo que no esperaba sentir cerca de sus glúteos y que le hizo sonrojar por completo. Johnny apretó los labios avergonzado y decidió sentarse rápidamente y salir de la cama, cargando a Mark a su vez y consiguiendo que éste envolviera sus piernas en su cintura debido a la impresión.

Birds [LuWoo]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt