𝘉𝘶𝘴𝘤𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘢 𝘮𝘪𝘴 𝘱𝘢𝘥𝘳𝘦𝘴 || 𝘴𝘰𝘶𝘬𝘰𝘬𝘶

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∘˚˳° Capitulo 5: Imprevisto escolar  °˳˚∘
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Por supuesto que se sabía el camino de memoria. Había ido cerca de ese lugar muchas noches, pero una cosa era ir sabiendo que estaría bajo la protección del mafioso, y otra era ir sin siquiera avisar, y peor aún, ir con el castaño; que según él, es una especie de fugitivo en la mafia, y a él lo querían asesinar hace algunos meses atrás. La idea de ir a la mafia sonaba horrible, entraría y saldría sin pierna y sin cabeza.

Cada uno tenía sus propios pensamientos. En todo el camino no habían hablado; Dazai parecía no tener nada que decir, Atsuhi tenía preocupación, y Aya solamente disfrutaba del momento.

El cambio en la actitud del castaño era demasiado notoria, había dejado sus bromas y ni siquiera tirarse a los autos hacía. Su mente estaba en lo más profundo de su ser, mientras caminaba a pasos lentos y tenía la mirada fija. Parecía que conocía de memoria el camino, pues en sus paradas sus pies se detenían y cuando era debido avanzaban, parecía más una rutina de la cuál nunca logro salir y lo comía vivo, pues en sus ojos se notaba como cada vez parecía más y más vacío, sin ninguna expresión y la vista fija volviéndose más oscura, y luego pasar a un tono rojizo cuando los grandes edificios se hicieron visibles.

Un grito despertó a ambos chicos de sus pensamientos.

-¿Aya-chan?- La atención de Atsuhi viajó hasta aterrizar en la pequeña, que parecía llorar.

-¡Tengo un proyecto que vale la mitad de la nota!

Confusión. Una ceja alzada y la mirada fija en la persona que hablaba.

-Al parecer Atsuhi no sabe de qué hablo...- Respondió despreocupada al ver la cara del albino. Hace dos segundos estaba preocupada y parecía querer llorar, en cambio ahora estaba totalmente relajada, explicándole al agente la situación.

-La maestra de historia es la pero, y nos puso a hacer un proyecto grandísimo; lo dejo hace tres meses y en la escuela lo íbamos haciendo poco a poco, y al final se me ocurrió dejar otro proyecto, entonces sin dos y no uno.

-Entiendo esa parte, pero no entiendo por qué estabas tan alarmada hace unos segundos atrás.

-Ah, es porque no hice nada. En el primer proyecto lo hice y me gane un cien, pero cada uno cuesta 50% y con los dos son un 100.

-Entonces, no hiciste el segundo entonces vas quedada, ¿no?

-Exactamente, Atsuhi-kun.

Fueron lo último que pronunció, pues ambos se quedaron callados viéndose el uno al otro.

Dazai, el otro agente que se encargaría de todo, se había quedado atrás de Atsuhi, no le podía importar menos lo que tuviera que hacer la niña para hoy, así que nunca apoyó nada a la conversación.

-¡¡El proyecto es para hoy y queda poco tiempo!!- Un fuerte ruido hizo salir de la especie de trance en que había entrado el agente, además de sorprender al castaño y asustar a las personas que iban pasando por ahí, volvieron a ver con mala cara, y otras con confusión.

-¿¡Para hoy!?

-¡Sí, para hoy, Atsuhi-kun! ¿¡qué demonios haré!?

Sus pequeñas manos se acercaron hasta la ropa del agente, lo agarro y empezó a sacudirlo mientras gritaba que se quedaría en la materia, luego de unos segundos el albino reaccionó, pero se limitó a contestar que no sabía que hacer. Esos dos eran un caso perdido.