The Queen Vampire.

01 Vínculo.

Bella. —Interrumpió la mirada de la menor, como si su comentario fuera sumamente importante.-

¿Bella o Isabella? —Arqueo la ceja molesta.-

Su nombre es Isabella, pero le gusta ser llamada Bella, es la hija de Charlie. El Sheriff. —Explicó por primera vez Alice, se acercó a la menor, observando con cuidado el atuendo de su pequeña hermana.- Estás muy guapa, Artemis. Me encanta la combinación de Rosa pálido, negro y dorado. 

Gracias Ali. —Sonrió brevemente.- Más tarde les daré los regalos que les traje a cada uno. Por ahora, quiero saber ¿si ella fue la culpable de que dejaran Forks? 

Mientras ella hablaba, los tres Reyes se sentían más impresionados, admirados no sólo por la belleza de su compañera, sino también por su fiereza y su increíble poder. Ellos ya deseaban estar con ella. Pero también estaban conscientes de que era pequeña. 

Piccola mia, ¿Cuantos años tienes? - Preguntó Aaro, ansiaba tocar a su compañera, pero respeta la privacidad de la menor.- 

—Volteo a ver al mayor.- 14 años, y disculpen mi osadía. Me presento, soy Elizabeth Artemis Cullen. La menor del aquelarre Olímpico. Y me imagino que mi tonto hermano mayor generó algún inconveniente a causa de una estúpida humana. -Volteo a ver con frialdad a su hermano y a la humana.- Mis reyes. Pido clemencia para mi clan y para Edward, por mi podrían matar a la humana, pero mis hermanos y padres, no. 

Justo cuando iba a inclinarse para terminar su solicitud, hizo que sus hermanos le siguieran con solo una señal. Debía proteger a su familia. Una mano evitó que ella terminara de inclinarse. 

La reina jamás debe agachar la cabeza. Tu eres nuestra compañera, no te permitiremos darnos una reverencia.—Marcus se acercó con cautela a la menor, siendo amable y cuidadoso. Escuchar el corazón armónico de la menor le llenaba de felicidad.-

Elizabeth sonrió, feliz de ahora saber que podría ser verdad. No había conectado a los ojos de los mayores, pero ahora que lo hizo sintió una corriente eléctrica a su alrededor. Y un extraño vínculo de protección. Incluso sabe que podrá estar con su amada familia y a la vez poder ir a Italia y estar con los reyes. 

Tú también eres humana, y sabes su secreto. ¿Eso no es injusto de tu parte? —Ante el comentario de Isabella, Jasper y Alice gruñeron. Nadie le dice algo así a su pequeña.- 

Hincate —Ordenó la menor, su poder está activo aunque es humana, por lo que obtener lo que desea siempre es algo que logra. Vio la expresión sorprendida de Edward.- Hermano, ¿me harás algo? 

Elizabeth sabe lo delicado que es un vampiro cuando alguien, quien sea, representa un peligro para su pareja. Pero ¿ no,el lazo de hermanos debe ser mayor que eso?

Si fueras otra persona, podría haberte matado, pero mi pequeña Elizabeth. ¿Cómo podría ir en tu contra? Además he cometido muchos errores, pero por favor deja que viva, es mi vida. —Rogó mientras se acercaba a la menor, para conectar ambas miradas.-

Exijo una explicación, sino me convence, sabes lo que haré. Después de todo soy humana y ellos no pueden hacerme nada. —Hablo demandante.- Te pedí que en mi ausencia cuidarás a la familia, pero ¿que recibo a cambio? Venir hasta Italia para rescatar a la familia que prometiste proteger de un problema mayor. Sabes lo delicado que es el secreto y aún así expusiste a mis padres, a nuestros hermanos. -Sintió la desesperación correr por su cuerpo, las lágrimas surcando su piel y la tristeza invadiendo su aura.-

Jasper lanzó una ola de calma a su pequeña, Alice se acercó a abrazar a la menor. Edward se sentía tan culpable, además que sintió como Jasper intensificar esa sensación. Pero los reyes, querían hacer algo para ayudar a su compañera, sentían dolor, un dolor indescriptible. 

No estés triste, mía Regina. —Caius se acercó a la menor.- Les daremos una oportunidad. 

Edward, ¿prometes hacer valer la visión de Alice? —Aaro preguntó, previamente había sido informado de la visión de una Isabella como inmortal. - o por el contrario dejarla y esta vez para nunca volver a verla. Incluso queda una tercera opción, matarla. 

Aaro habló como si nada, Elizabeth ya no lloraba. Por el contrario esperaba el momento para reprender a Edward y hacer saber su inconformidad ante sus padres y sus hermanos mayores. 

Si, mi rey. —Edward respondió con tristeza. Odiaba ver llorar a su hermana y más si sabe que él es la causa de ello.- 

Nací para ésto, seré vampiro pronto. —Afirmó Isabella quien aún estaba hincada. Nada le había hecho daño, ¿cómo era posible que esa infanta le hiciera algo así? Tomaría venganza. La hará ser odiada por su clan, después de todo solo ha de ser alguna huérfana o recogida por la piedad de Carlisle y Esme.-

Si estás tan segura, te daré el privilegio de la duda, sólo un error más, y yo misma te mataré. —Elizabeth se repuso, ahora era rodeada por los reyes. Se sentía muy feliz.- Ahora todos salgan. Hablaré con los reyes. Pero Edward, Alice y Jasper salgan hasta la entrada, ahí estarán dos de mis hombres con el helicóptero listo, tienen la orden de llevarlos a la mansión. —Volteo a ver a la humana. - Y tú, Isabella, supongo que puedes irte sola. Si no, pide ayuda. Yo no haré nada y prohíbo de forma terminante que alguno de ustedes le ayude. Luego sabré si ustedes dijeron algo, o si, como mi intuición me lo dice. Ella lo investigó. 

Isabella fue escoltada por alguien de la guardia menor. Mientras que los Cullen fueron escoltados por Alec y Jane. Dejando la sala del trono sólo con los reyes. Los tres Reyes admiraban a la menor. 14 años y ya tenía el mundo a sus pies por cuenta propia. Ahora en adelante, ellos harán lo necesario para complacerla. 

Ahora que estamos solos. - Decidió bajar toda defensa y sonrió abiertamente, no es muy común que el humano sienta el vínculo de compañero hasta ser convertido, pero ella es diferente.- Cuando cruzé miradas con cada uno de ustedes sentí una corriente eléctrica y un tirón. ¿Ese es el vínculo? 

Ambos reyes estaban felices, no sólo su compañera había sentido el vínculo, sino que al parecer también lo aceptaba. Aunque fuera un poco, ellos están más que encantados si ella acepta estar con ellos, por su edad están conscientes que deben esperar, pero al menos desean que ella viaje a verlos al menos una par de veces al año o ellos poder ir a su residencia y hacer visitas cortas, después de todo no pueden estar mucho tiempo lejos del castillo. 

Tienen suerte de conocer su mundo. Quizá no de una forma normal, pero lo conozco… —Sonrió dulcemente, sabía las consecuencias de un vínculo no aceptado, pero aún así actuaría con astucia.- 

¿Significa que aceptas el vínculo? —Preguntó Aaro con esperanza.-

Si, pero tengo un par de condiciones para ésta relación. —Levantó la mano para marcar pausa y una ligera distancia.-

Lo que desees, amore mio. —Marcus afirmó.-

Bien, primero tienen que ser pacientes, tengo 14 años y hay muchas cosas que deseo hacer antes de convertirme en vampiro. Y segundo, cuando quiera venir lo haré, pero también irán a verme. Y en caso de ser necesario, me gustaría que fuera mi padre quien me convirtiera. Sólo si no está él, podrán hacerlo ustedes. —Sus condiciones no sólo son muy puntuales, también son justas.- 

También había pensado en eso, eres aún pequeña, pero no queremos que te alejes de nosotros. Quizá puedas venir varios días. En lugar de ir a otro lugar podrías estudiar en Italia. O quizá podría ir unos días contigo por turnos. -Caius hablo con un poco de duda, pues tenía muchas posibles estrategias en la mente para tener una relación efectiva.-

Veo que se van turnando para hablar. —Sonrió satisfecha. Pensé que sería muy difícil todo.- me gusta.