«Que idiota eres Adriel»

Debí contarle a mi padre que el plan que habíamos hecho él y yo, la había mandado a la mierda cuando estuve con Dhara en esa fiesta.
Debí decirle a Dhara que yo debía robarle a ella y no a Nat. Debí decirle que mi padre planeaba hacer un trato con su padre para robarle su dinero. Debí decirle que el empresario que llegaría a su casa, sería mi padre y que llegaría pensando que es su nuera.

Me maldije miles y miles de veces cuando no medí la velocidad de mi coche cuando casi choco con otro carril.

Pero no quería que Dhara se enterará de esta manera. No ahora.

En pocos minutos yo ya estaba estacionado mi coche en la casa de Dhara y para mí sorpresa un señor de atuendo impecable bajaba de un coche que se me hacía del todo reconocido.

Ni siquiera me di cuenta de como estacione bien mi coche cuando ya iba detrás de mi padre.

Estaba a punto de subir las escaleras hacia a la entrada cuando lo llame.

-Papá.

Este se detuvo al instante y  cuando se volteo su primera impresión fue de alivio.

-Vaya, pensé que te habías arrepentido de hacer esto. ¿Por qué no haz respondido mis llamadas?

Camine hacia él, observando que en la puerta no apareciera nadie.

-Yo no…pude- De pronto todo que había planeado por meses esto se me venía en encima con una culpa.
Este ignoro mis palabras y solo me observo.

-¿Qué se supone que llevas puesto?, no que ibas a utilizar un traje para esta ocasión de victoria. -Dijo.

-Papá…-Intente no perder el margen.

-Como sea, entra tu primero, ya te acercaste a la princesa Becker es más fácil que el viejo cobre confianza conmigo. -Me extendió su mano para que pudiese ir primero.

Pero yo ni siquiera me inmute.

-¿Qué sucede? -Se encontró del todo confundido.

-Papá, no puedes hacerlo.

-Claro que si, miranos dónde estamos Adriel, enfrente de la casa de los Becker, ¿Te imaginas? O bueno me imagino que tú haz venido muchas veces ya con Dhara ¿No?

-Papá…-Trague saliva intentandome acercar a él.

-Bien, si no quieres pasar tu primero lo hare yo primero, no quiero perder una oportunidad por ser impuntual. -Este camino hacia la entrada pero lo detuve mates de que pudiera seguir.

-No puede hacerlo papá. – Este se detuvo, ahora volteando con cierta credulidad.

-¿Hacer que?

-Más bien…yo no puede con  Dhara.

Este no tuvo una sola reacción.

-¿No pudiste que? -Respondió secamente.

-Te eh mentido todo este tiempo. -Seguí.

Amor Por Error ©Where stories live. Discover now