¿Que pasaría si en una fiesta te acuestas con el novio de tu mejor amiga que también resulta ser mejor amigo de tu novio en la infancia?
No era sencillo responder.
Cada giro, caída, movimiento era algo primordial para que bailar se viera conciderad...
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Ciudad de New York. Dulce y maravillosa ciudad.
El viento era frío y tembloroso, sentir que en cualquier momento me iba congelar. A mí parecer no era la mejor temporada del año pero aún así me parecía magnífico la nieve en sus calles, el humo frio al hablar, y las orejas casi volviéndose hielo.
Era temporada de invierno, me iba después de quedarme con mi abuela. Hacía mucho que no la había podido ver, no desde que mi abuelo falleció y me recibí como policía en la ciudad está misma ciudad.
Hacia un año de que me había graduado, estaba feliz, después de todo esto era lo que realmente quería. Pero desde entonces tome un descanso. Había investigado la muerte de mi abuelo desde hace el mismo tiempo que falleció, era alcohólico y se rumoreaba que se drogaba. Era mayor que mi abuela, pero eso no le impendía seguir consumiendo.
El me apoyo en la mayoría de mi carrera, me dio su casa , comida y una habitación cerrada para poder estudiar. Le agradecía todo lo que bueno que tengo ahora. Aunque mi madre me mandaba dinero sabía que tenía otras necesidades más importantes como lo son mis dos hermanos. Los mellizos.
Así que la muerte de mi abuelo fue dolorosa para mí y para mi abuela. Me dolía saber que pronto me tendría que ir a la ciudad de mi madre para conocer a mis hermanos.
Así que mi abuela después de unos meses -seis para ser exactos- me dijo que dejara por la paz el caso de mi abuelo, que no iba ir para nada bueno. Decidí aceptar, para no preocuparla, pero la realidad era otra.
Había decidido mentir, mentir que me iba con mi madre y ayudarla con sus que aseres de madre soltera, pero en cambio cancele el vuelo y me quedé aquí por un largo tiempo buscando una casa, un trabajo. Había conseguido uno, que me daba posas sobre lo que hacía mi abuelo.
Evitaba a toda costa cualquier estancia que llegara con mi abuelo, como lo era una simple pastelería o la plaza de ropa. Evitaba a toda costa a mi abuela para que no fuera descubrirme.
Lo admito era difícil al principio, siempre estaba con ese temor de ser encontrado, pero al paso de días, meses, todo resulto ser mas fácil para mi. Resalte en la investigaciones que hacia, incluso tuve un grupo donde comandaba, pero claro si perder la verdadera razón por la que estaba ahí.
Anduve con muchas chicas pero nada serio, después de todo no quería nada que fuese alguna distracción.
Todas las tardes era algo nuevo que buscar, negocios, vendedores con quien trataba con mi abuelo. Todo era confuso al principio de las investigaciones pero poco empezaron a cobrar sentido.
Estaba a punto de encontrar el patrocinador de sus consumidores de mi abuelo, pero mi madre me tomo de sorpresa en una llamada, diciendo que la abuela estaba preocupada de no saber nada de mí y que pensó que yo estaba en su ciudad. No tuve mas remedio que comprar un boleto de avión para a ir a su ciudad para darle una explicación y así ir para convivir con mis hermanos.
