Capítulo 7

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El ruido húmedo de sus labios chocando, las prendas de ropa cayendo al suelo una por una y sus pieles rozándose era algo que Felix jamás pensó escuchar.

Hyunjin le había empezado a guiar hacia la cama nada más comenzar a besarse, sus dedos ágiles y rápidos habían desabrochado la ropa de Felix desde que tuvo oportunidad. Le quitó la camisa con la suavidad de alguien que va con ansias, y empezó a besar su cuello como si fuera el manjar más delicioso que jamás hubiera probado.

Los jadeos de Felix pronto se convirtieron en gemidos, pues Hyunjin no dejaba de apretarle contra su cuerpo, frotándose desde el abdomen hasta los muslos. El pelinegro se quitó su camisa con una mano, mientras con la otra seguía sujetando al rubio, casi con miedo de que se le escapara de entre sus brazos.

Felix sentía la lengua de Hyunjin, sus labios, su saliva... le estaba volviendo loco. No se había sentido así nunca. Nadie le había besado de aquella manera ni había sentido esa imperiosa necesidad que le estaba quemando por dentro en aquellos instantes.

No esperó a que Hyunjin le quitara los pantalones, pues sus propias manos ya estaban haciendo el trabajo, soltando el botón y bajando la cremallera, deslizándolos sin despegarse del otro. Una vez sus pantalones estuvieron en el suelo, se encargó de los del pelinegro. Cuando ambos estuvieron solo en ropa interior, se separaron un momento.

Juntando sus frentes se miraron durante lo que pareció una eternidad. Sus alientos se mezclaban cálidos y húmedos, como el resto de sus cuerpos.

Felix se dio cuenta de que nunca había hecho eso, no al menos con un hombre.

Y sin querer, la certeza de aquel pensamiento le hundió.

Hyunjin notó como algo en su mirada cambiaba, y se separaba de él, sentándose al borde de la cama en silencio.

- ¿Qué pasa Felix? - preguntó preocupado, sentándose a su lado asegurándose de no tocarle mucho por si le asustaba.

Él pensó un momento antes de responderle. Aún sentía su corazón ardiendo y latiendo con fuerza en sus oídos. Sus manos temblaban y el sudor frío se secaba en su nuca intentando encontrar las palabras adecuadas.

- Yo... Hyunjin, yo tengo novia y creo que esto no está bien... - susurró Felix bajando la cabeza derrotado.

- Oh eso... Ya lo sabía – le comentó suave Hyunjin. - No te preocupes, no le diré a nadie.

Felix guardó silencio, en el fondo sorprendido porque Hyunjin sabía que tenía pareja y aún con todo, él había intentado acercarse a Felix de esa manera.

- ¿Por qué te has acercado a mí entonces? - estaba confuso.

Hyunjin rió suave.

- Porque a mí me gustas tú y ya. No me importa quién esté por medio.

Felix sintió dos cosas a la vez: algo bueno y algo malo.

Lo bueno fue que se sintió halagado y deseado. Que a alguien le diera igual todo con tal de poder llegar hasta ti era, en cierto modo, algo nuevo para él.

Lo malo: la culpabilidad. Ahora que habían hablado de Sowon, la sentía más presente que nunca.

- Hyunjin... creo que no puedo hacerlo – dijo sintiéndose más culpable aún.

El pelinegro le puso una mano cautelosa sobre el muslo, intentando transmitirle tranquilidad.

- Está bien Felix, no pasa nada.

Se levantó en silencio y se vistió con rapidez mientras el rubio se dejaba caer sobre la cama. Antes de irse, se acuclilló frente a Felix.

- De verdad eres precioso. Te prometo que no le diré nada a nadie, pero me ha gustado pasar este rato contigo.

Wedding Planner ~ HyunLixWhere stories live. Discover now