13 (+18)

3.2K 144 304
                                    

-En algún momento de mi vida humana fui bisexual, con Nakime, la chica que antes se llamaba Camile, teníamos confianza así que intenté volver a estar con una mujer, pero al igual que la primera vez no me gustó y me retract- espera.- Kokushibo sonrió de lado y abrazó la cintura de Douma. -¿Estás celoso~?- Preguntó con un tono juguetón.

Las mejillas de Douma se enrojecieron de un momento al otro. -¡C-Claro que no!¡Y-Y mucho menos de ti!-

-Vamos Douma, admítelo. Estás celoso porque te enamoraste de mi.- Habló Kokushibo acariciando sus caderas. -Ya admitiste que te atraigo físicamente, admitiste que te encanta lo que te hago. ¿Por qué no admites tus sentimientos?- Susurraba cerca de su oído rodeándolo de las caderas para que no escape y se quede en la cama con el.

Douma se sonrojó sentándose a la altura de las rodillas del demonio y apoyó ambas manos en su torso. -Koku... Esto está muy mal...- Susurraba Douma intentando torpemente disimular su erección del mayor. -Tu eres un demonio y yo un torpe chico adolescente... Si bien ya tuvimos relaciones sexuales una vez, soy inexperto. Antes de conocerte apenas había dado mi primer beso y hice un 69 a medias. No podré complacerte.- Lágrimas comenzaron a caer de sus ojos. -Y... No se si soy bueno para ti. Nunca recibí amor de nadie ni amé a nadie. Si se que me atraes físicamente porque ya lo sentí antes, pero no se como se siente el amor porque nunca nadie me amo.-

Kokushibo miraba preocupado al humano que lloraba en sus brazos y limpió sus lágrimas con los pulgares suavemente mientras se inclinaba y juntaba su frente con la del peliplata. -Douma... Déjame hacerte el amor... Déjame amarte como nunca nadie te amó.- Tomó el mentón del menor y alzó su cabeza haciendo que lo vea a los ojos. -Yo te voy a amar y proteger Douma, prometo estar contigo por la eternidad y no abandonarte jamás.-

-Lo dices porque eres un demonio.-

-No. Lo digo porque te amo.-

Solo bastó oir esa frase para que Kokushibo abra sus seis ojos sorprendido al sentir los cálidos y dulces labios de Douma sobre los suyos.

Inicio (+18)

Sin dejarlo separarse, lo tomó de las caderas jalándolo hasta dejarlo sentado sobre su entrepierna endurecida e introdujo la lengua dentro de su boca profundizando el beso.

Douma le correspondía torpemente el juego de lenguas mientras con sus manos acariciaba tímidamente el cabello de Kokushibo y movía las caderas ansioso frotándose con la erección del mayor una y otra vez en un lento y tortuoso vaivén sobre la ropa que comenzaba a molestar a ambos.

La ansiedad y la erección del demonio crecía cada vez más y más. Hasta que un punto no pudo soportarlo más y volteó dejando a Douma acostado boca arriba en la cama, se acomodó encima suyo y le arrancó la ropa viendo con lujuria como su pequeño y delicado cuerpo reaccionaba ante el, sus pezones estaban erizados, su pene estaba erecto y de este salía líquido preseminal, su entrada estaba humedecida y su piel estaba estremecida como coloquialmente se le llama a la "piel de gallina".

-Eres hermoso Douma.- Halagó Kokushibo mientras se quitaba la ropa.

El menor se sonrojó al verlo completamente desnudo y al ver su pene erecto se relamió los labios. -Y tu eres un Dios Kokushibo~-

Kokushibo sonrió de lado y acarició las caderas de Douma acomodandose encima suyo. -No soy ningún Dios, soy el demonio que va a hacerte el amor.-

El Loyola se sonrojó hasta las orejas ante sus palabras y lo empujó. -A-Acuestate en la cama, q-quiero intentar algo.- Tartamudeó viéndolo nervioso.

Al de seis ojos no le gustaba obedecer órdenes, pero por su humano haría lo que sea. Por lo que rápidamente se acostó en la cama boca arriba llevando las manos detrás de la cabeza para apoyar la misma en sus antebrazos. -Adelante.-

Mi demonio acosador ||Kokudou|| (R+18)Where stories live. Discover now