El freak de mi vida. +18

Capítulo 22. Desesperación Carnal. +18

Terminamos de acomodar todo en mi habitación, papá se quedó un momento a charlar con nosotros y después se despidió para salir de mi habitación y dirigirse a la suya. Por fin estábamos sólos, era lo que esperaba, Eddie se encontraba tirado en el piso de mi habitación, en cuanto salió papá se levantó de un salto y me tomó para besarme, yo correspondí pero sentía su beso muy suave. No podía olvidar lo que sucedió en su camioneta, su mano apretando mi pierna y después subiendola un poco más. No podía separarme de él en ese momento, lo besé con más intensidad, mientras enredaba mis manos en su cabello, pero de pronto se detuvo y se alejo un poco de mi.

Eddie:cariño que haces?

Dijo un poco sorprendido

___:qué? No te gusta?

Eddie:por su puesto pero, tu padre está a unos metros...

___:lo sé, pero tu tienes la culpa, no puedes jugar así conmigo...

Eddie me miro y se dibujo una sonrisa perversa mientras  me tomaba de la cintura y besaba mi cuello hasta subir a mi oído y decir.

Eddie:mm...jugar cómo? Así? Yo se que te gusta...

Mientras seguía besándome una de sus manos recorría mi pierna, sus manos eran tan suaves, sus movimientos eran ágiles, me exitaban demasiado, poco a poco introdujo su mano debajo de mi Falda y comenzó a acariciarme sobre mi ropa interior, sus dedos recorrían toda mi zona de arriba a abajo. Separó sus labios para bajar y besar mi pecho a través de mi escote, esta vez su agilidad para abrir mi sujetador aumento, de un movimiento me despojó de él, y mis pesones se dejaron ver endurecidos por el calor del momento, no tardó en bajar hasta ellos y comenzar a jugar con su lengua.

Solté un pequeño gemido, su lengua estaba haciendo maravillas, pero en seguida puso su mano sobre mí boca.

Eddie: silencio bonita, no queremos que nos atrapen... Portate bien para mí...

Dijo mientras regresaba a mi pecho, su mano debajo de mi Falda seguía moviéndose, esta vez retiro mi ropa interior para tener contacto directo con mi intimidad, estaba realmente mojada, su mirada se dirigió a la mía mientras introducía con delicadeza sus dedos, no quería perderse mis expresiones de placer ante sus movimientos.
La mirada del chico tierno había desaparecido, en su lugar había una mirada de perversión indescriptible, por un momento no pude reconocerlo, pero eso me encantaba, sus movimientos dentro de mi eran lentos pero muy placenteros, poco a poco aumentaba la velocidad provocando más placer en mi, mi cuerpo se retorcía ante sus ágiles movimientos y mi mirada se separó de la suya por un momento, el placer que sentía me obligaba a cerrar los ojos, pero Eddie se detuvo y me tomó del rostro con firmeza acercándose a mi para decirme

Eddie: Mirame! Tienes prohibido cerrar los ojos, entiendes muñeca? Sino tendré que castigarte

Su voz se volvió grave y ronca, sólo asentí con mi cabeza, ya que seguía cubriendo mi boca para evitar que gritara. Sus dedos me penetraban cada vez con más fuerza, haciéndome retorcer, mis ojos volvieron a cerrarse por un momento y Eddie me miró y susurro a mi oído.

Eddie: te lo advertí muñeca, ahora serás castigada.

___:no cariño... Que harás? Prometo portarme bien.

Eddie cubrió mi boca de nuevo y siguió moviendo sus dedos dentro de mí, esta vez más rápido, sentía que ya iba a venirme pero entonces se detuvo y sacó sus dedos de mí. Una sonrisa burlona se dibujo en su rostro.

Eddie:ese será tu castigo muñeca, tendrás que aguantar las ganas de venirte...

Dijo mientras la mía sus dedos y se alejaba de mi.

___:maldito bastado...

Comenzó a reír, baje de mi cama y lo jale hacía mí, pero evidentemente era más fuerte que yo, así que con rapidez se volteó hacia mí tomándome con fuerza de los hombros y tirándome de nuevo en mi cama.

Eddie:que pretendes linda? De nuevo quieres que te castigue?

___:tal vez, pero de otra forma, me toca complacerte...

Dije mientras me acercaba a su boca para besarlo, baje una de mis manos hacia su pantalón y pude sentir su dureza a través de él. Seguí acariciandolo, me separé de él para quitarlo de encima de mí y tomar su lugar para que él quedara recostado sobre mi cama ahora. Desabroche su pantalón mientras el me ayudaba a bajarlo, y entonces su dureza apareció, no pude contenerme y baje mi cabeza hasta su pene para comenzar a lamerlo, ahora yo tenía el control. Mientras lo hacía volteaba a mirarlo, sus expresiones de placer eran de admirar, tomó mi cabello y comenzó a moverme con suavidad, después de un rato su respiración comenzó a agitarse más, sabía que se vendría, así que me separé rápidamente como el lo hizo conmigo.

Eddie me miró incrédulo.

Eddie: con que así quieres jugar ehh? Ven acá

Me tomó de la cintura y comenzó a besarme desesperadamente mientras metía con dureza sus dedos dentro de mí y los movía con rapidez, así que yo hice lo mismo con su pene, lo tomé y comencé a masturbarlo también.
Nuestras respiraciones se agitaron, Eddie se recargo en mi hombro dejándome escuchar algunos gemidos ahogados que me encendían más, nunca había experimentado algo así con alguien, Eddie provocaba cosas en mi que nadie antes había hecho.
De pronto un chorro cristalino salió de mi empapando su abdomen, había terminado, pero el aún no

Eddie:Dios.... Eres perfecta sabías? Sigue sigue... Ya casi termino linda.

Su respiración se agitaba más y más, me arrodillé ante él para recibir su semen en mi boca, manchando un poco mi nariz y ojos, pero por fin estábamos satisfechos.

Eddie me miraba algo sorprendido, pero complacido.

Eddie: mierda eres...eres... Jodidamente perfecta, dejame limpiarte, eres un desastre.

Dijo mientras soltabamos una risita. Esa noche nos acurrucamos en el piso y dormimos juntos hasta antes del amanecer, para que mi padre no nos encontrara juntos.