Familia

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Después de esa charla en el jardín trasero ambos azabaches regresaron a la casa y colocando un lugar más para el visitante en la mesa la familia Uchiha por fin se sentó a comer, el ambiente era algo tenso, Sarada miraba de reojo a la joven versión de su padre, Sakura cubría con una pequeña manta de color azul celeste, parte de sus pecho debido que al pequeño Daisuke, estaba siendo alimentado por la pelirosa algo normal para toda la familia Uchiha con excepción del joven azabache, que desviaba la mirada, el azabache mayor el sostenía al pequeño Itachi que jugaba con los cubiertos de la mesa, mientras que ambos jóvenes solo miraban su plato sin mencionar nada al respecto de lo sucedido hace algunas horas.

-No tengo hambre...discúlpenme tengo que irme a preparar para una hacer algunas cosas-musito la joven ojivioleta al levantarse de su lugar sin mirar a nadie-cuando termines de entrenar con tu equipo, Sarada entrenare con ustedes...dile eso a tus amigos-menciono antes de ir hacia las escaleras.

-Espera...Natsu-musito el patriarca del clan-tenemos que hablar.

-No es necesario Sasuke-sama...además tengo cosas que hacer...-la ojivioleta siguió su camino, hasta desaparecer de la vista de los demás.

El patriarca del clan Uchiha suspiró con pesadez y solo tomo su te, se podía sentir el ambiente pesado. El viajero Uchiha solo miraba de reojo la situación sin decir nada miraba como cada uno de los miembros de la familia se retiraban de la mesa, al solo quedar el y su contraparte mayor y el chico peliverde sentados en la mesa. 

-Sasuke-kun podemos hablar- musito la matriarca del clan a su esposo al asomarse un poco a la cocina.

Ambos azabaches miraron al escuchar la melodiosa voz de Sakura, solo que el mayor de ellos se levanto y camino hacia su esposa mientras los dos jóvenes restantes solo se miraban entre ellos. Sakura estaba decidida ha hablar con su joven esposo, no le agradaba mucho como había tratado a sus sobrinos. Así que busco la manera de quedarse a solas con el, mientras su esposo iba a ver a Naruto mientras tanto Sarada iría a entrenar con sus compañeros, el mayor iba algo forzado ya que no quería dejar a su esposa con su contraparte menor.

La pelirosa dio un suspiro de alivio cuando por fin cerro la puerta de la casa al despedirse de Sasuke y Sarada ahora solo quedaba, como haría que Yukio también saliera de casa. El joven vengador solo miraba sentado en el sofá como los infantes jugaban dentro de un pequeño corral en la sala. Mientras la pelirosa terminaba de hacer una lista de compras para poder deshacerse de su sobrino, así que lo fue a buscar y después de una pequeña riña entre el peliverde este salió de la casa a cumplir el encargo por parte de la matriarca del clan.

-Ap...ap...ap.-balbuceaba el pequeño pelirosa al joven vengador al mirarlo y sonreírle, mientras le estiraba un pequeño dinosaurio de felpa se veía algo viejo.

-Hmp...-soltó un pequeño gruñido el joven azabache al mirar fríamente al pequeño pelirosa.

-¿Qué pasa Sasuke-kun?...No mires así a Daisuke-musito detrás del joven la madre del pequeño.

-Porque te desiste de ellos, acaso no temes quedarte a solas conmigo...-mira la mujer detrás de el de reojo.

-La verdad no...es que quería hablar contigo a solas y con ellos no podría sin que mi esposo no interfiriera-

-Y que quieres hablar conmigo...-

-Quiero que le pidas una disculpa a los chicos, no tienes derecho a juzgarlos como lo hiciste-.

-Me niego no pienso pedir perdón para mi ellos no son nada, incluso Itachi no es más que un asesino ente mis ojos, no me interesa lo que diga mi yo de este lugar.-

-No deberías decir eso Sasuke ellos son tu familia...al menos date la oportunidad de conocerlos...ellos te admiran más de lo que demuestran...además no voy a permitir que dañes a mi familia entiendes.-se coloca frente a el y lo mira de manera seria.

-¡Quien te crees para darme ordenes!...-se levanto de manera brusca sorprendiendo al pelirosa, mientras la sujetaba con rudeza su muñeca izquierda.

Fue mayor la sorpresa para ambos cuando el joven azabache sintió el filo de un Kunai cerca de su cuello y percatarse de una ligara respiración cerca de su nuca, para la kunoichi expandió sus ojos con sorpresa al pasar por alto la presencia de la ojiamatista, la joven bajaba para pedir disculpas por su comportamiento lo único que pudo notar fue la agresión de la versión más joven de su tío.

-¡SUELTALA!...-alzo la voz la pelinegra con verdadera molestia-¡NO ME INTERESA SI ME MOLESTAS A MI PERO A SAKURA NO LA LASTIMARAS!-

-Natsu cálmate por favor-pidió la pelirosa nerviosa.

El joven vengador soltar la muñeca de la mujer pelirosa y encaro ala joven detrás de el provocando un leve corte en su cuello con el filo del arma que rosaba su piel, fue hasta este punto que pudo ver el color carmesí que tenían los ojos de aquella chica, supo enseguida que se trataba del Sharingan.

-Así que posees el Sharingan...quiero enfrentarme a ti-musito el Uchiha con una mirada algo inquietante.

-Sasuke-kun...Natsu-chan...paren-menciono la pelirosa severamente preocupada por ambos jóvenes.

-Acepto, pero si te venzo le pedirás perdón a mi hermano y a tía Sakura-mencionó la joven sonriendo de igual forma que el azabache frente a ella.

-Eso esta por verse...-

-Ni se les ocurra hacerlo-

-Tranquila tía Sakura no le hare mucho daño solo quiero enfrentarme a el quiero ver que tan fuerte era mi tío Sasuke a mi edad.-bajo su Kunai guardándolo de nuevo-sígueme vamos al campo de entrenamiento así lucharemos con más comodidad.-

-Espera no tienes por que luchar Natsu...porque lo haces-se acerca preocupada.

-Lo hago por mi familia...por favor confía en mi...quiero saber que tan fuerte era cuando venció a papá-sonríe.

-Natsu...pero yo los acompañare...-la pelirosa tomo con cuidado ambos infantes y miro a los jóvenes frente  a ella.

Así fue como los restantes de la familia Uchiha salieron de casa rumbo a los campos de entrenamiento para la lucha de ambos azabaches, la pelirosa estaba algo preocupada por lo que sucedería a continuación rogaba porque su esposo o alguien interrumpiera esta locura.

Mientras tanto en la torre del Hokage

-Cálmate Teme...me estas mareando-murmuro el rubio algo aburrido.

-Hmp...-el patriarca del clan caminaba de un lado a otro pensando una manera de como regresar a su homólogo a su línea de tiempo.

-Me pregunto, como se lo tomo el mini teme el tema de tus sobrinos-musito el Hokage mientras se estiraba en su silla.

-Nada bien...-musito sin pensarlo el azabache.

Así siguieron charlando ambos y buscando la manera de devolver a el visitante inesperado a su hogar para que la corriente del tiempo y espacio recupere su correcto movimiento sin aletear nada más.

>>>>>>>>Continuará<<<<<<<<

Mira al futuro Sasuke-kunحيث تعيش القصص. اكتشف الآن