Deseo Prohibido [En Edición]

📌 Capitulo 49 📌

Mi celular vibra y reviso el mensaje.

Alex: Disfruten sus vacaciones, no te preocupes por mis papás que ellos ya saben.

Frunzo mi ceño y volteo a verlo, sigue igual y hasta podría decir que mejor, me puedo dar cuenta que estuvo haciendo ejercicio en este tiempo, sus brazos se ven trabajos y sus piernas igual.

— ¿Qué haces aquí?

Me sonrie y da un corto paso hacia mi.

— Vine por ti —confiesa.

Trago y miró hacia otro lado, me cruzó de brazos y regresó mi mirada hacia la suya.

— ¿Cómo supiste donde estaba?

— Tu hermano, él me busco y hablo conmigo —suspira—, Elena enserio necesito hablar y decirte que...

— Vamos hermosa que el agua está increíble —llega Carlos con la voz agitada y se detiene de golpe al darse cuenta de la presencia de Jack.

— Lo siento no sabia que estabas ocupada.

— No pasa nada, ahorita voy contigo —le sonrió.

Asiente y antes de darse la vuelta fórmula un “es el buenorro de la fiesta", suelto una pequeña risa.

— ¿Te llamo hermosa?

Volteo a mirar a Jack y ruedo los ojos, el no me mira, furnce el ceño observando en donde se acaba de ir Carlos.

— ¿Qué me querías decir?

— Qué necesito hablar contigo —dice mirándome de nuevo.

— ¿De qué?, ¿de cómo te fuiste sin decir nada a nadie? o mejor aún ¿de cómo me ignorabas y nunca contestaste ninguna de mis llamadas? —reclamo—. ¡Le marque a tu hermano para saber algo de TI Jack, estaba desesperada pensando en que algo te había pasado y me doy con la sorpresa que solamente te fuiste!

— Elena, cielo así no fueron las cosas.

— ¡No me llames cielo! —pido con los ojos llorosos.

— Si tan solo me dejaras explicarte todo.

— ¡Lo tuve muy claro desde un principio, y si, se que lo jodi todo y que por mi culpa todo terminó pero tenía una jodida razón!

Ahogo un sollozo y me doy la vuelta dispuesta a irme, no doy ni tres pasos cuando se pone enfrente de mi y me abraza fuertemente.

En el momento que lo siento, después de tanto tiempo lloro, lloro tan fuerte que siento como mis garganta se lastima por mis sollozos, hago puño su camina intentando tranquilizarme.

Siento sus caricias en mis cabello y mi espalda.

— Enserio perdoname cielo —susurra con voz rota.

Niego con la cabeza llorando.

Después de unos minutos logro separarme de él, me limpio las mejillas de las lágrimas e inhalo hondo.

— No quiero verte —susurro.

Lo miro a los ojos y mi mundo se viene abajo, mirarlo así, tan vulnerable me hace querer abrazarlo y besarlo todo el tiempo. Sus ojos están rojos y contiene las lágrimas apretando sus labios.

— Entiendo —responde con voz ronca—, pensé en que alomejor y podía tener la oportunidad de hablar contigo.

Me rodea y sigue caminando, giro mi cabeza veo como camina cabizbajo. Cierro los ojos por un momento y con suspiro decido ir tras él. Lo tomó del brazo y lo volteo.