Soy Idol.

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They call me artist (artist), they call me Idol (Idol!).

Lo siento, necesitaba hacer referencia a aquella canción de bangtan.

Mi alma siempre se ha alimentado del canto y del baile, claro que adoro trabajar como Idol. El trabajar en música es algo que disfruto con el alma. La música siempre ha brindado un hogar enorme a mí, me hace sentir como si estuviera en una cobija calientita.

Era mi mayor hogar antes de conocer a bangtan pues me daba el amor más grande que recibía en aquel entonces.

Soy Idol solista en mi realidad deseada y me haría la persona más feliz serlo en esta realidad también. En algún futuro sacaré música, espero y me lleguen a apoyar. Bueno, ese ya es otro tema.

Al cantar, no siento como si yo estuviese haciendo sonar mis cuerdas vocales. Es difícil de explicar, pero siento como si mi alma se apoderara de ellas y así sacara cualquier sentimiento. Me siento levitar cada que canto.

Y bailar ni se diga.

Bailar siempre ha sido mis alas, mi oxígeno, mi habilidad más vital. Es algo que me hace sentir viva. No, es lo que más me hace sentir viva.

En cuanto a los escenarios, siempre han formado parte de mi vida. Al presentar, me siento en mi elemento. Siento que es mi destino dedicarme a ello.

Cuando me enteré del cambio de realidades (y creí en ello, pues al principio acepto que pensé que era mentira todo esto) mi corazón no podía haber revoloteado más. Lo primordial siempre fueron los chicos, sí, pero el ser Idol me erizaba la piel.

Recuerdo muy bien la primera vez que entré a mi estudio de grabación. Me enamoré completamente. Se sentía como un lugar al cual yo pertenecía. HYBE es una empresa con muchísimo dinero, por lo que las herramientas de música eran profesionales y buenísimas.

Cuando entré a la sala de práctica de baile, por poco y me arrodillo.

El lugar es muchísimo más amplio de lo que se ve en cámaras, me sentía diminuta. Las bocinas tenían un muy buen volumen y los espejos eran gigantes. "Estoy soñando" pensaba yo. Luna, créeme, no era solo un sueño.

El primer concierto fue espectacular también

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El primer concierto fue espectacular también.

Las luces eran mayormente rosas, el lugar estaba llenísimo, mis fans gritaban más fuerte que Dios. Era eufórico, lleno de adrenalina, felicidad plena y abundante. Sentía que mis problemas se iban por el drenaje y que nada más importaba excepto la presentación. Me olvidé del mundo un ratito.

Oh, y mis fans son un amor. Siempre me ha gustado ser yo misma y así enamorar a la gente. Resultó que mis fans me enamoraron a mí.

Trato de darles ese sentimiento de hogar (el cual mencioné anteriormente) a través de mi música. Quiero darles ese mensaje que todo es posible y que se mantengan optimistas ante la vida. Quiero transmitirles ese mensaje de que sentir cosas está bien, no importa si es tristeza, felicidad, orgullo, enojo. Quiero hacerles sentir un hogar a través de mí.

Y no solo a ellos, quiero hacerles sentir eso a ustedes también. <3

Por último, la empresa no es perfecta. Cabe recalcar aquello pues por más que el grupo más influyente de K-Pop sea parte de ella, sigue teniendo sus fallas grandes y pequeñas. La industria del entrenamiento es así. Es algo exigente, que te puede llegar a drenar, que te exige todo lo que tienes y puedes dar al 100%. Por ello, es digna para aquellos que la aman realmente.

Yo la amo. Y vale toda la pena del mundo para mí.

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¡Gracias por leer!
<3

Con amor y brillitos,
Luna.

Cambio de Realidad: Vivir dos vidas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora