Y lo peor de todo era la hora del cambio, después de quitar el pañal sucio, Martha solía llevarlo hacia su nariz y aspirar su olor cosa que perturbaba a Paola.

Justo en eso estaban ahora.

Estaban exactamente a unos 15min de que Felipe llegará pero a diferencia de las primeras dos veces Paola ya no se sentía emocionada por verlo, por lo general no era una persona rencorosa pero no sabía lo que le pasaba, ¿a donde se había ido el Felipe y Daniel que ella conocía?, parecía como si un alien los hubiera secuestrado y dejado en su lugar a estas copias malhumoradas y cansadas que no le prestaban un solo gramo de atención en su lugar.

Ninguno de los dos se salvaba, Daniel, a pesar de ser más paciente con ella, también había probado el como era cuando la paciencia se le agotaba,
Ayer justamente Paola no quería dejarlo ir, no quería quedarse ni un minuto más con Martha, cosa que Daniel interpretó como un berrinche.

Flashback

Pato, se me hace tarde. —dijo tratando de Safarse de su agarre.

—¡N-no! No te vallas daddy. —Suplicó al borde del llanto.
No podía retrasarse más, no tenía tiempo para esto, Paola arrugaba su traje al no quererse Safar de el y ya llevaba retrasado 15min por todo lo que sucedía. —Suficiente Paola, debo irme. — con brusquedad y fuerza quitó los brazos de la niña al rededor de su cuello y se la entregó a Martha bruscamente. —hablaremos de esto cuando regrese. —dijo con evidente enfado.
obviamente esa noche no hubo nada de que hablar, Daniel se ocupó revisando unos documentos de suma importancia que se olvido totalmente de regañar a su niña.

Fin del flashback

Volviendo al presente. Martha cambiaba lenta pero hábilmente el pañal sucio de Paola, su cara estaba sonrojada a más no poder, incluso desde el punto de vista de Paola, un hilo de saliva salió de su boca.

Incómoda, Desvío su mirada hacia su cuna donde yacía intacto su ex mejor amigo peludo, realmente no lo había tocado mucho desde el lunes, pero ahora mismo sentía unas enormes ganas de abrazarlo, ahora el era la única cosa que podía reconfortarla.

Sintió un leve rose en sus partes íntimas que le hizo volver su mirada a Martha asustada. —Tranquila, solo te limpio. —trató de ignorar el hecho de que Martha la estaba tocando de más, hasta que sin duda sintió algo que no debía de pasar se quedó quieta comenzando a temblar, un dedo más se introdujo dentro de ella. Sus instintos se encendieron y rápidamente se levantó empujando a Martha lo más lejos y fuerte posible pateandola en el proceso

—Tu... Maldita mocosa. —en un ágil movimiento tomó a la niña y la recostó en sus piernas boca abajo. Teniendo su trasero desnudo al aire comenzo a nalguearlo mientras le gritaba lo mal agradecida que era. Paola trato de escapar desesperadamente sin éxito alguno, ganándose fuerza extra en los próximos azotes.

Sin ser conciente del tiempo y debido al ruido ninguna de las dos se dio cuenta de el chirrido que había hecho la puerta de entrada al ser abierta.

Apenas Felipe puso un pie dentro se dio cuenta del ambiente pesado, y al estar todo en silencio su oído de agudizó escuchando el fuerte llanto de su hija en la planta de arriba.
Disparado subió las escaleras y entró al cuarto de su bebé azotando la puerta viendo a la mujer a cargo de su hija azotandola fuertemente mientras la niña solo se dedicaba a suplicar y llorar.

Martha se quedó en shock, antes de que pudiera dar alguna explicación Felipe le arrebató a la niña recostada desnuda en su regazo y la acuno contra su pecho.

una little inusual [EDITANDO]Where stories live. Discover now