-Ya chicos, Axel dale la ropa a Elizabeth.
-Piensa rápido.- Le lance la ropa. Ella se asustó.
-¡AXEL!.- Me regaño mi mamá.- No hagas eso; ahora Eli, puedes ir a cambiarte, le avisare a Astrid que estarás con ella.- Dijo y salió de la habitación.
-Creo que deberías cambiarte.- Le dije y mire la ropa.
-Ya se Witteveen, no soy tan idiota como tú.- Me insulto.
-Pues no pareces.- Me defendí.
-Muy gracioso.- Habló y salió de mi habitación. Me saque la camiseta.
-Al fin a dormir.- Dije mientras me saque los pantalones quedando solo en boxers.
Narra Elizabeth
Fui al baño, y me puse la camiseta de Axel, que me quedaba muy alta, se me veian mucho las piernas. Quise ponerme los pantalones que me dieron, pero no estaban.
-Se me deben haber quedado.- Salí del baño corriendo, rogando que Witteveen no se encuentre en su habitación, me daba vergüenza ir. Pero no siempre me iba a quedar en el baño ¿No? Salí mirando, que no halla nadie en el pasadillo. Y fui a la habitación de él.. Llegue y vi el pantalón que me dieron tirado, me acerque pero el idiota de Witteveen estaba tirado en su cama solo con boxers
-AAAHHH.- Grite. Axel salto de la cama y me miro y bueno también grito.
-AAAHHHH.- Gritamos los dos.- NO ME MIRES.- Dijo
-PARA QUE QUIERO VERTE, IDIOTA.- Le grite y me cubrí los ojos con las manos, pero la camiseta se levantó y se me vio mi ropa interior, me di cuenta y Axel me estaba mirando.
-Ese color te da bien.- Me dijo y se rió.
-Eres un idiota.- Le dije y cogí el pantalón y me fui al baño a cambiarme, el pantalón me quedaba muy grande tuve que arreglármelo. Cuando ya estaba lista, salí y la señora Pardo, me estaba esperando afuera.
-¿Qué fueron esos gritos?.- Me pregunto. Mierda que le digo.
-Bueno, señora Pardo, no quise incomodar pero...- Bueno es hora de la venganza.- Pero... su hijo, me molesta, y bueno como usted sabe en mi estado.- Me toque el estómago.
-Lo se querida, hablaré con Axel. Ese chico tiene que entender.- Me dijo comprensiva.- Ahora vamos con Astrid.- Me agarro de la mano. Llegamos a la habitación de Astrid, tenía dos camas, así que supongo que yo dormiría en una, ella estaba en la laptop.
-Hola.- Dije tímida, Astrid me miro y después volvió a su computadora.
- saluda a Elizabeth, Astrid.- Le dijo su mamá.- Se amable con ella.- salió de la habitación.
-¿Qué tal?.- le pregunte.
-Bien.- me respondió, pero ni me miro.
-Es muy bonita tu habitación.- Le dije.
-Gracias.- Dijo. No tenía tema de conversación. Cerró su laptop.- ¿Por qué te quedaste aquí? Pregunto Astrid.
-Bueno, es una larga historia.- Le dije
-Dímelo tengo tiempo, no me voy a mover.- bueno creo que a veces la gente no entiende cuando alguien le dice es una larga historia, es que no la quiero contar, pero bueno terminaremos siendo familia.
-Bueno...- Le conté, claro sin decirle todo lo que mi mamá me dijo y tragándome las lágrimas.- Y ahora estoy aquí.
-Debe ser feo.- Me dijo.
Nadie dijo nada, hasta que ella me pregunto
-¿Te gusta mi hermano?.- Le mire sorprendida.
DU LIEST GERADE
Casada por Obligacion.
JugendliteraturCasada por obligacion. La vida puede cambiar por completo por un tan simple error que ocurrio aquella noche. Un error que puede marcar tu vida para siempre. A lo largo de lo que paso aquella noche, Axel y Elizebeth se van dando cuento que al final e...