lovely

❇️ twelve ❇️

Park Jisung estaba mucho más que avergonzado. Quería que la tierra lo tragarse y lo escupiera en otro lugar del mundo, ¿Perú? Sería buena idea. Nadie lo conocería y lo darían por muerto.

Ugh..¿Por qué dijo eso?

Bueno, no era mentira, no era chiste que gustaba de ella. ¡Si lo hacía!

Pero sentía que era muy apresurado. Hace menos de una semana que se conocían y...ya le gustaba. ¿A quien no le gustaría HyeMin? Esa era la verdadera pregunta.

Cuando pasó frente a su casa con su abuelo, no se animó a hablarle más de lo necesario por miedo a hacer el ridículo, porque siempre, siempre lo hacía. Se ponía nervioso y metía la pata, así que mejor no le sacaba charla.

Pero Jaemin insistió en invitarla. Parecía tener el mismo carácter que él y podrían llevarse bien. No lo dudaba, pero hacer amigos no era lo suyo.

Luego pasó lo de Chenle y no dudó en tener una mini discusión con él. Antes le pasó, cuando aún no era mejores amigos, ¡A penas se conocían! Y Chenle le respondía de mala manera. Se sintió muy mal cuando Mark volvió a casa con Chenle siendo regañado. Escuchó cuando el mayor quiso ayudarle a HyeMin, pero cayó de espaldas en los dos escalones que tenía. Miró algo escondido por la ventana de su cuarto, pero HyeMin pasó corriendo a su casa.

No tenía la historia completa, pero tendría que haberle pasado algo malo para que llorara.

Jeno y Jaemin les insistían en que podrían pedirle a HyeMin que les hiciera un tour por el pueblo, solo Mark, Haechan y RenJun estaban de acuerdo. Chenle y Jisung preferían esperar un tiempo, ambos por vergüenza.

Jaemin desayunó con Min y Jisung sintió algo de envidia. Ojalá poder ser lo suficientemente extrovertido como para conocer más a tu crush.

¡Es que eso era lo más cercano! HyeMin probablemente no sabía ni de su existencia, pero allí estaba él, queriendo conocerla más.

Conoció aquella parte más sensible de HyeMin cuando, por la tarde, fue a comprar helados y al volver estaban el chico del supermercado y ella charlando en la galería.

Cuando vió a la chica llorar, no sabía cómo reaccionar. ¿A quien le gusta ver a su crush llorar?

Esperó y cuando terminó aquella escena, corrió a casa, intentado no ser reconocido si ella estaba aún cerca o mirando por la ventana.

No le contó a nadie sobre lo que escuchó, se lo guardó y tomó la decisión de dar el primer paso. Si fallaba...por lo menos lo había intentado. ¿Verdad?

Uno de esos días, paseando por la plaza y conociendo un poco más el centro, se encontró con un grupo de chicos sentados en una banca del parque, charlaban y, en realidad, no le interesaba. En verdad no, pero cuando escuchó el nombre de HyeMin, fingió buscar algo y tardar en ello.