Because, all I need is you. (All I Need Libro 1). |EN EDICIÓN|

Capítulo 7.

BRADLEY.

Pensé que cantaría normal o terrible, pero canta... ni siquiera tengo las palabras para describir lo que presencie me quede inmovilizado al terminar la canción. Y es que sonábamos tan bien juntos.

Su voz es algo suave, pícara, pero al mismo tiempo desgarradora y fuerte.

—Ella es realmente buena—habla Eliette.

—Si, y linda—comenta Daniel.

—Ni se te ocurra. —advierte Charles, señalando a Daniel muy serio.

—¿Qué cosa? —Pregunta inocente.

—Liarte con ella, ahora es parte de la banda.

—No sé para qué haces tanto show. No me liare con ella ni loco.

—Más te vale —le contesto yo.

Lo que faltaba un amorío entre compañeros de banda.

Me siento en unos de los mubles que hay en el porche a lado de Charles y miro a las demás casas.

—Canta muy bien, más que bien—digo.

—Si—Contesta Charles mirándome y yo volteo a verlo.

—No pensé que sonaríamos tan bien. Me gusta— confieso.

Eliette se va y nos deja a los tres solos y comenzamos a hablar. En eso suena mi teléfono, lo reviso y es un mensaje de mamá.

Charlotte Baker: Necesito que vengas a la casa, tu papá te envió algo.

Guardo el teléfono y me paro.

—Me tengo que ir—anuncio.

—¿Te llevo? —pregunta Daniel.

Yo lo empujo con mi mano y rio un poco.

—Vivo a lado idiota.

Me despido de los chicos y voy a mi casa, mi mamá me está esperando en la sala con una caja en la mesita que hay.

—Llego esto, estaba en la entrada cuando llegue. —comenta mamá.

Planto un beso en su cabeza y me siento en el mueble en el que esta ella, abro la caja y hay ropa, algunas cosas que necesitaba, pero, no está él.

Voy a mi habitación y dejo las cosas, agarro mi cuaderno donde tengo mis composiciones, trabajo en una que no he terminado. Me gustaría tocar estas canciones en el bar donde vamos a estar—si es que nos aceptan, aunque es probable que si—, pero solo se puede canciones ya conocidas; los chicos también escriben y cantan, bueno todos cantamos solo que preferimos tocar los instrumentos, por eso preferimos buscar un vocalista, que ahora es Lara.

Agarro mi guitarra y toco una melodía, intento, pero no me llega nada, esto es una mierda. Llevo meses con una melodía en mi mente, pero nunca llega.

Dejo la guitarra a un lado de la cama, miro el techo y suena el teléfono, lo veo.

Nicole llamando...

—Increíble— presiono la pantalla para contestar— Hola.

—Hola ¿Cómo estás? —su voz dulce suena a través del teléfono.

—Bien.

—Eres demasiado seco, pero bueno. Te llamo para saber si quieres salir mañana.

—No, creo que mañana tengo ensayo.

—Oh ¿te cambiaste de banda? Te dije que era lo mejor—

—No— la interrumpo.

«¿Qué le pasa? no me cambiaría de banda jamás, nunca.»