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—¡Hitoshi! —Ya estaba listo, simplemente no se quería levantar y afrontar lo que había estado obligándose a hacer hoy.

El lunes finalmente había llegado y tenía que ir al instituto y ver a Denki, cosa que en un día normal le emocionaría y hasta lo animaría aún más a ir al establecimiento, sin embargo ahora estaba determinado a declararse pero de tantos planes que habían divagado por su cabeza, al final seguía sin saber como iba a hacerlo.

Ni siquiera entendía por que el tema le estresaba tanto ya que sabía que la respuesta iba a ser positiva, pero hablar de sus sentimientos era algo muy difícil para él y Hitoshi estaba empecinado con que el momento debía ser especial, por lo que su cerebro no dejaba de maquinar ideas que muy probablemente ni siquiera serían posibles de hacer en un colegio.

Terminó por levantarse de la cama a regañadientes y bajó las escaleras sin emitir palabra, cosa que Shota agradecía ya que tampoco tenía muchas ganas de hablar a esas horas de la mañana. Hizashi, por otro lado, se encargaba de generar una conversación que terminaba siendo un monólogo ya que nadie contestaba, pero él se las apañaba para divertirse solo en el camino.

En cuanto entró al aula sentía temor de siquiera dirigir la mirada hacia Denki. Su grupo de amigos, claramente obviando su nerviosísimo, preguntaban algunas cosas más sobre sus papás con efusividad y Hitoshi las respondía desganado. Seguía sin entender por que el hecho de que Aizawa y Yamada fueran sus padres era tan emocionante para ellos, pero es que el hecho de que sus profesores en efecto tuvieran una vida les impactaba a sobremanera.

Aún así, el respeto hacia Aizawa en sus ojos no se disipaba, o eso mostraron en cuanto su profesor entró al aula. Aún seguían tratándolo como siempre, aunque eso también quería decir que hablarían y se reirían en su clase, pero también quería decir que Aizawa podría castigarlos sin que a ninguno le pareciera extraño.

Al final todas las preocupaciones de Hitoshi fueron en vano; todo seguía igual. De igual manera, sus amigos seguían bromeando con el hecho de que Hitoshi fuera el hijo de Shota y, ahora que sabían que era cierto, era aún más gracioso.

El tiempo pasaba y ahora su temor sobre mirar a Denki había cesado causando totalmente lo contrario; no podía parar de mirarlo. Lo observaba como si al hacerlo encontraría la respuesta a su futura declaración. El rubio podía sentir la miraba de Hitoshi sobre él, por lo que, en cuanto lograba unir sus miradas, se encargaba de sonreírle y causarle un obvio cortocircuito al de cabello morado.

Fue así como todo el grupo pasó el día juntos como lo hacían a principio de año, ahora también conectando algunas cuestiones que antes no tenían respuesta pero que ahora el hecho de que Shota sea su padre les daba una explicación. Casi le generó una extraña nostalgia a Hitoshi poder haber pasado su día así ya que últimamente no había sentido mucha paz.

Por mucho de que Hitoshi no les hubiera contado la historia completa, ahora si sentía que era completamente transparente con sus amigos y le gustaba que así fuera. Se sentía mucho más cómodo ahora que no tenía nada que esconder.

—Oye —El hecho de que Denki se le acercara específicamente a hablarle le había puesto los pelos de punta. Simplemente mirarlo lo intimidaba y le ponía el corazón a mil y ahora el rubio le estaba dirigiendo la palabra —¿Necesitas algo?

—¿Que? —Por poco tartamudea. Hitoshi soltó una pequeña risa nerviosa —No... ¿Por qué?

—Tú no... —"Dejas de mirarme" quiso decir, pero al pensarlo con detenimiento, Denki sintió que quizás decirlo sonaría pretencioso, como si estuviera diciendo que Hitoshi no podía dejar de mirarlo por que le gustaba o algo así, por lo que frenó a medio camino —Nada, olvídalo.

Daddy issues (bnha)Where stories live. Discover now