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Annie:
- ¡Vamos Annie que se hace tarde!
- ¡Esperen!- grité recogiendo una flor
Corrí como desquiciada para alcanzar a Daniel y Michael, había decidido venir con el a Australia a pasar unos días y por mucho que no debía estar aquí moví todos mis asuntos de la fábrica para venir y si, muy seguramente tendría un sin fin de trabajo para cuándo volviera, pero necesitaba con urgencia que las cosas con el Australiano volvieran a estar bien y no tensas como últimamente lo están.
- Eres muy distraída - dijo Michael cuando llegue a su lado
- Ya nos llevamos así Italiano- dije divertida
- Tu te hiciste pareja de Daniel - dijo encogiéndose de hombros
- Empiezo a creer que estás celoso - dije escuchando a Daniel reír
- Oigan, sigo aquí- dijo el mencionado
- Estoy marcando territorio cariño - dije colgandome de su brazo
- Eres la otra - dijo Michael enseñándome la lengua
- Quisieras mi rey- dije con una sonrisa enorme
- Es tan extraño- dijo Daniel dándome un beso en la cabeza
Los tres seguimos caminando en silencio, hacía mucho calor pero no me quejaba y aún que tenía sed podía aguantar.
- ¿Que comeremos?- dije de pronto
Ambos me giraron a ver cómo si fuera un extraterrestre y no era para menos había comido mucho pero que querían, no cene y tenía mucha hambre por la mañana.
-¿ Después del desayuno que te comiste quieres comer más?- dijo Michael incrédulo
- Tal vez - dije encogiéndome de hombros
- Estas loca- dijo negando
- Mi loca...- dijo Daniel sonriendome
- Gracias por defenderme cariño - dije riendo
- Ambos son insoportables- dijo Michael acelerando el paso
- Nos amas- dijimos al mismo tiempo, ambos nos vimos con sorpresa y una gran sonrisa, nunca habíamos coincidido con las palabras, solo lo había hecho con Lewis y rara vez con Max, ambos nos sonreímos con complicidad antes de empezar a cantar para molestar a Michael- !La cucaracha!, ¡la cucaracha!, ¡la cucaracha ya no puede caminar! ¡porque le falta! ¡porque le falta! ¡una pata para caminar!
Cantamos a la par, el con su español malísimo y yo siendo la exagerada que soy.
- ¡Oh callense por favor!- dijo haciéndonos reír
•••
- Ahora solo deja que se caliente y listo - dijo la mujer a mi lado
