THE MAFIA BOY - ZIAM

14

— Todo fue espectacular, Aileen se portó bien y supo que responder en todo momento. — Le dijo Liam a Mauricio por teléfono.

— ¿En serio? Me alegro mucho, yo y Marco anoche fuimos a comer. — Comentó. — Y vi unas cosas que me recordaron a ti así que te las llevo para cuando vuelva.

Liam fingió llorar.

— Te extraño, sabes que no tengo más amigos aparte de ti.

— Volveré el sábado.

— Dale, acá te cuento todo con detalles.

— Bueno bestie, nos vemos, saludos a Aileen.

Liam se despidió de su amigo y cortó el teléfono, quiso ir a la cocina pero chocó contra el pecho fornido de Zayn.

— ¿Con quien hablabas?

— Mauricio.

— ¿El no está de viaje? Si quiera me dijo.

— Está en Japón con su novio. — Le dijo. — Ojalá tuviera un novio con el que pudiera viajar.

— Tengo un amigo que su papá está soltero. — Habló Aileen saliendo de su habitación. — Es muy guapo y no está tan viejo.

— Iré a recogerte mañana, ahí me lo muestras.

Aileen asintió, fue hacia la cocina y sacó el jarrón con jugo y un vaso, mientras se servía Zayn llegó a su lado.

— ¿Qué pasó con "el novio de papá" ?

— Fue solo por el momento, no te ilusiones con mi padre Malik. — Espetó Aileen.

— Tienes que ayudarme, tu papá en serio me gusta. — Le pidió. — Te pagaré.

— Hecho.

Aileen se fue de la cocina con una pequeña sonrisa hacia su habitación.

Mientras que Zayn soltó un pequeño suspiro y se cuestionó en que se estaba metiendo.

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— ¿Quieres ir por un helado? Es que tengo que hablar una pequeña cosita contigo. — Le dijo James entrelazando su mano con la de Aileen.

— Claro.

Ambos caminaron hacia la heladería más cercana de su escuela y pidieron sus helados, se sentaron en las mesitas que habían afuera del local y James comenzó a hablar.

— Tenemos que terminar. — Soltó de repente. — Ya no me gustas y necesito a alguien que me da la atención que tú no me das.

— Siempre te presto atención.

— Estás todo el día pegada a tus libritos.

— Ante todo están mis estudios, perdón por querer ser alguien en la vida James. No es mi problema que tú no estudies y seas un bueno para nada, no es mi culpa por querer que me vaya bien y no decepcionar a mis padres. Si ya no quieres ser mi novio está bien, algo que me enseñó mi padre es jamás rogarle a un hombre, y créeme que tú no serás la excepción.

Aileen se paró de su asiento y tomó sus cosas, dejando a James solo en la mesa de la heladería. Tiró el helado a un basurero y caminó hasta su casa, su padre le daría un buen consejo.

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Aileen apenas llegó a su casa corrió a los brazos de su padre llorando, le dijo lo que había pasado y lloró aún más fuerte en los brazos de su padre.

— Ay mi amor, sabía que este momento llegaría pero no pensé que tan rápido.

— Yo digo que deberías dejar de llorar y bebamos unos shots de tequila. — Dijo Zayn sentándose al lado de Aileen.

— No la incites a beber alcohol.

— Con eso se curan las penas.

— ¿Me dejas beber un poco? — Preguntó Aileen al separarse del abrazo de su padre. — Solo será esta vez hasta que cumpla dieciocho.

— ¿Tu la cuidarás? — Le preguntó a Zayn. — No me haré cargo si se emborracha, tú limpiarás su vomita, si llora, si rompe algo y ve como la acuestas.

— Lo haré, lo prometo.

Aileen con una pequeña sonrisa se colocó sus zapatos y acompañó a Zayn al supermercado para ver las bebidas que llamaran su atención y que quisiera probar.

En cuanto llegaron a la casa se sirvieron cerveza, mientras Liam planchaba la ropa, Zayn y Aileen bebían en la sala.

— Sabe a pipí, no me gusta. — Dijo Aileen con una mueca.

— ¿Has probado pipí?

— Hice muchas cosas cuando era pequeña, no querrás saber que es lo que llegue a comer.

— Comió tierra, arena, se comía los mocos, una vez casi se traga un mosquito, una piedra y un sin fin de cosas más. — Le dijo Liam a Zayn.

— ¿Cómo es que sigues viva?

— Desearía no estarlo.

Aún que Aileen dijo que lo había gustado la cerveza, se tomó tres al igual que Zayn. Aún no estaba borracha, así que pasaron al siguiente trago.

— ¿Tequila o whisky?

— Whisky.

Zayn sirvió un poquito de whisky en ambos vasos y comenzaron a beberlo.

Aileen ya se sentía un poco mareada al igual que Zayn, decidió dejar su vaso en la mesa pero el vaso resbaló de su mano haciendo que se rompiera en pequeños pedacitos contra el suelo.

— Malik. — Le reclamó Liam yendo por la escoba y una pala para barrer el desastre.

— Perdón bebé, te compro diez iguales, lo prometo. — Le dijo el castaño con un pequeño puchero. — ¿Me das un besito?

— Hueles a alcohol.

— Uno chiquitito.

Liam dejó un besito en sus labios y luego se limpió su boca.

— Tu padre no me quiere. — Le habló esta vez a Aileen.

— Le cuesta admitir sus sentimientos, pero yo se que si. — Le susurró Aileen.

— Aileen, deja de decirle cosas a Zayn, lo estás ilusionando más que yo.

Aileen rió.

— ¿Con que vamos ahora?

— Con el tequila.

Zayn nuevamente sirvió el tequila en varios vasos y comenzaron a beberlo.

Liam negaba con su cabeza mientras veía como Zayn y Aileen se reían de las tonterías que decía.

Había llegado la hora de ir a dormir, Zayn tomó a Aileen entre sus brazos y la llevó a su habitación, le quitó sus zapatos y la tapó.

— Si quieres vomitar, te tapas las ojeras y lo haces. — Le dijo mientras se tambaleaba.

— ¿Las ojeras?

— Si.

Aileen cerró sus ojos para poder dormir y Zayn se fue.

— Malik, ve a acostarte. — Le dijo Liam a Zayn.

— ¿Y si quiero hacer pipí?

— Vas al baño.

— ¿Y si quiero vomitar?

— Vas al baño.

— ¿Y si...

— Malik, acuéstate y duerme.

Zayn formó un puchero y comenzó a llorar.

— No me grites.

Liam rodó sus ojos y lo tomó de su brazo, lo llevó a la habitación y destapó la cama, le quitó sus zapatos y lo acostó.

— No me dejes solito.

— Voy a apagar las luces y vengo ¿Si? Ya no llores. — Liam limpió sus mejillas y fue a apagar todas las luces.

Se acostó al lado de Zayn y esperó a que esté se durmiera para luego dormirse él.