CAPITULO 1

3.5K 149 52
                                    

Prólogo....

¿Siquiera me amaste alguna vez?... Solo he sido un juego... Pero sabes?... Te amo, ¡YO TE AMO!

.....

Has sentido el frío seco? Aquel que cala los huesos hasta el fondo... No? Que bien, porque yo lo he sentido... No se desearía ni a mí peor enemigo.

"¿Amor? ¿Amor? ¡Evan!"

De un sobresalto, su mirada dejó de estar puesta en el triste cielo, para regresar a los ojos de la bella persona frente suyo.

"¿Te hice esperar?...".

"¿Que pasa contigo? Te estoy llamando desde hace tanto tiempo" .- Observó el cielo. "No entiendo que tiene de bello, solo es un día nublado cualquiera".

Tomó su brazo cálido, dejando posar su fría mano dentro de ese barato abrigo.
"¡Vamos se nos hace tarde! ¡La función debe haber comenzado!... Corre!".

.....

Capitulo 1

"¿Alguna vez me amaste?"


Beep beep beep... Beep beep... Beep beep...

Las sabanas se movieron justo para caerse de la cama, mientras una gran mano trató de tomar algo de aquella mesa a su lado.

"Mmm maldita sea...".

Beep beep.. beep...

"Jodida alarma, juro que cambié el tono... Cómo sea, quiero dormir, pero si lo hago llegaré tar...".

Sus ojos saltaron de inmediato.- "¡8:30!? ¡No puede ser! ¡Mierda mierda!".

Las calles y tiendas, eran bulliciosas como siempre. La gente corría con sus calientes cafés en mano. Los pitidos de los carros eran molestos, esperando que los jóvenes estudiantes cruzaran lo más rápido posible.

Cada mañana era igual, monótona y aburrida. Aún así la cara de Evan no perdía su brillo, pues parecía esperar que al final de ese día, algo bueno lo alegrara... Y tal vez, quizás, esa alegría tenía nombre y apellido.

- Más rápido idiotas!! ¡Vamos no veo que se muevan! ¡Cuidado bastardos, esos vinos valen más que sus jodidas vidas!

- uno, dos, tres, cuatro... Cin... Cin.. eh? ¡¿En donde mierda está ese imbecil de Evan?! ¡Eh!

Aquel hombre de mediana edad estaba completamente furioso, mirada arrugada de costumbre, cabello desordenado, y por si fuera poco, padecía de un crónico mal aliento.

Los jóvenes que solo se dedicaban a realizar su trabajo, no podían evitar reír cada vez que este hombre aparecía frente sus ojos.

Pero aún ignorando la voz chillona, era imposible que lo hicieran callar.

- ¡Idiotas! ¡Si de nuevo están cubriéndolo como de costumbre, los despediré a todos! ¡¿Escucharon?!!

Su silueta era lamentable, bajo de estatura, cuerpo de oficinista de tiempo completo, sin feromonas, sin nada especial.

Un beta común y corriente, rodeado de 4 alfas fuertes, altos, y de gran apariencia.

AMO JUGAR CONTIGO Where stories live. Discover now