Núnca te deje solo. (Zukoxtu).

Trabajo duro.

Iba corriendo buscando un lugar donde poder ver la gran herida que tenía en mi brazo, llegue a una pequeña casa a las afueras del pueblo, donde perdí el conocimiento al entrar a la pequeña casa.

-Bien Tn, ahora demuestrame que tanto poder puedes liberar con tu agua control.-dijo el señor del fuego mirándome atentamente mientras estábamos en el jardín.

-Pero todavía no lo controlo muy bien.-dije mirándolo con duda.

-Eso no importa con el tiempo veremos que tan poderosa podrás llegar a ser.-dijo tocando mi hombro.

-Bien.-dije asintiendo y empezando a utilizar mi agua control, auque era pequeña y no sabía mucho podía controlarlo bien.

-Bien suficiente.-dijo haciendo que me detuviera.-Eres pequeña y lo controlas bien, conforme vayas creciendo espero y puedas controlarlo como toda una maestra agua, serás una guerrera poderosa y temida que se ganará el respeto de todo el mundo.-dijo acariciando mi cabeza para después irse de ahí.

Cuando abrí los ojos, miré en todas direcciones, encontrandome con Zuko sentado a un lado mío.

-Pero que..-dije intentando levantarme pero fui detenida por Zuko.

-No te levantes, estas herida.-dijo recostamndome de vuelta.-Cuando llegamos te encontramos desmayada en el suelo, te atendí la herida, pero no muevas tu brazo por el momento.

-Hablas sobre la quemadura de mi brazo no es así. -dije sin ninguna expresión mirando al techo.

-Si, lo siento no pensé que el ataque fuera directamente a ti.-dijo Zuko agachando la cabeza.

-Fue mi culpa me distraje y ya no me pide cubrir, no tienes porque culparte.-dije mirándolo.-Me tengo que ir, Azula me esta esperando.-dije levantándome pero me detuve al sentir alder mi brazo en cuanto lo apoye en el suelo.

-Zuko esto no es nada para mi, esta simple quemadura no es nada comparado a otras cosas que me han pasado.-dije sentándome.

-No iras a ningún lado, y menos si estás herida.-dijo ayudandome a pararme.

-Porque no mejor atiendes a tu tío el recibió más daño que yo y ya esta despertando.- dije caminando hacia el.

-Tio al fin despertaste.-dijo Zuko al verlo abrir los ojos.

-Iroh.-dije preocupada.

-Azula te atacó, fue un ataque sorpresa.-dijo Zuko mientras su tío intentaba levantarse.

-Viniendo de Azula no me sorprende tanto, pero tu Tn, me sorprende de verdad.-dijo mirándome con el seño fruncido.

-Lo siento de verdad, no creí que el ataque fuera para usted ya que ambas apuntábamos a la niña ciega.-dije agachando la cabeza en forma de vergüenza.-ademas no fue el único que salio lastimado.-dije quitando los vendajes dejando mostrar mi brazo quemado.

-Que, pero como.-dijo sorprendido.

-El ataque que lanzaron todos me sorprendió y no pude cubrirme, terminé quemada de mi brazo izquierdo, pero fue mi culpa no se preocupe.-dije cambiando mi rostro a uno neutral.

-De verdad lo siento mucho.-dijo levantándose hasta quedar sentado pero quejándose de dolor.

-Espero averlo hecho como te gusta.-dijo Zuko dándole una taza de té, que su tío acepto muy gustoso pero que al probarlo su expresión cambió totalmente a una de desagradó. Iroh me volteo a ver y yo solamente negué.