Y Si Hablamos Del Destino... *EN PAUSA*

Triple A: Alcohólicos Anónimos y Amor

Era lunes, Hope iba que empezar con las juntas de AA esa misma noche, eran todos los días, duraban una hora y media y empezaban a las 7 p.m. y terminaban a las 8:30 p.m.
Hope tenía miedo del proceso, pero sabía que Callie estaría, ella le había prometido que iba a estar ahí para ella en todo momento, para cualquier cosa que necesite, si la cosa está bien iba a estar y si no, aún más, así que eso reconfortaba a Hope. Estuvo todo el día pensando en la junta y, gracias a eso, en Callie, no se pudo quitar esas dos cosas de la cabeza.
A eso de las 6:30 p.m. Hope, comenzó a prepararse, Callie iba a tomarse la molestia de llevarla a las juntas y luego traerla a su casa, Hope intentó evitar eso, no quería molestar, decía que "no era meceaario" pero Callie no aceptó un "no" como respuesta, decía que le agradaba hacerlo y que, aparte de eso, su turno en el bar, los viernes y sábados, empezaba a las 9:00 p.m. así que llegaba justo a tiempo y "le quedaba de paso", así que a Hope no le quedó más remedio que aceptar, no lo veía como algo malo, de hecho, le gustaba que Callie se preocupara tanto por ella, pero intentaba no demostrarlo, por lo menos no tanto... Eran las 6:45 p.m. y Callie había llegado a la casa de Hope a recogerla

H: Yo voy! - gritó mientras bajaba las escaleras luego de haber oído el toque en la puerta
T: Quién es? - preguntó asomándose desde la cocina

Hope lo ignoró completamente, saludó a su madre y luego se fue, tanto Thomas, como Lea, estaban desinformados de a donde iba a ir su hija, a Thomas no le importaba mucho, que digamos, simplemente se fue a ver televisión, pero Lea estaba preocupada, no sabía a dónde iría su hija, con quien iría ni si quiera a que hora volvería, intento preguntar antes de que Hope se vaya, pero ella se fue demasiado rápido como para darle tiempo a su madre de hacer preguntas

*En la puerta de la junta de AA (6:55 p.m.)*

C: Cómo te sientes?
H: Nerviosa, no pudo negarlo - dijo con una risa media inquieta
C: No te preocupes, todo saldrá bien, y en el hipotético caso de que salga mal, ten la seguridad de que voy a estar aquí afuera esperándote

Hope sonrió con una mueca de agradecimiento y luego bajó del auto. Al entrar a la junta empezaron a presentarse y contar sus historias, todos se escuchaban atentamente sin decir nada, no juzgaban, no miraban mal ni nada por el estilo, era satisfactorio para Hope estar allí y ver que no era la única que tenía esos tipos de problemas, más allá del alcohol, que era el problema principal por el cual estaba allí, si no también todo lo que ella había pasado y pasaba aún, era similar o en parte igual a lo que le sucedía al resto, todos se entendían y ayudaban mutuamente, era lindo, Hope pudo contar su historia a otras personas y no sintió apuro, al contrario, sintió que poco a poco se iba liberando.
Al terminar la sesión, salió de allí y allí estaba ella, estaba Callie, apoyada en su auto con dos cafés bien calentitos para el frío, esperándola, como le había prometido, el rostro de Hope se convirtió de repente en una mueca de felicidad inmensa y Callie le sonrió mientras la saludaba con su cabeza

C: Sube, hace frío - le extendió la mano con uno de los cafés a Hope
H: Gracias - recibió el café y subió al asiento del copiloto
C: Cómo te fue? - preguntó curiosa y tomó un sorbo se su café
H: Bien! - contestó alegre - fue genial!

Callie sonrió mientras bebían sus cafés, iban en dirección a la casa de Hope y hablaban de como le había ido en su primera junta.
Cuando llegaron, antes de bajar, Hope dijo:
H: Oye Call...
C: Dime - contestó luego luego de tragar su último su último sorbo de café
H: Gracias, si no fuera por ti nunca habría hecho esto, significa mucho para mi...
C: Ya te dije que no me tienes que agradecer, haría lo que fuera por verte bien, mejor, y esto estaba a mi alcance - Hope sonrió y Callie siguió - y créeme cuando te digo que siempre voy a estar para ti, a partir de ahora no te va a faltar nadie, te lo prometo - Callie acercó sus labios al rostro de Hope y le dio un suave y cálido beso en una de sus mejillas, a centímetros de la boca, y con la mano acarició la otra
Hope se ruborizó y un calor recorrió su cuerpo, luego del beso, se miraron unos segundos y Hope bajó del auto para entrar a su hogar, Callie se quedó ahí hasta que ella entró.
Ninguna de las dos dejó de pensar en lo que había pensado, había sido el típico "no fue nada" pero ambas tenían más que claro que aquel "no fue nada" una a terminar siendo el "principio de un todo" y eso, les gustaba demasiado.