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—Ya es el quinto que se va esta semana—Wooyoung bajo su tableta tachando el nombre del último secretario del alfa— ¿No podrías dejar tus caprichos y simplemente dejarlos trabajar en paz?
—Tss, cada uno de los imbéciles que trajiste es uno más incompetente que el otro—el alfa le tiro su saco gigante a Wonyoung, una linda beta que actualmente era su estilista de tiempo completo— esta descosido así que lo necesitaría en condiciones para antes de las nueve y media.
La chica sin objetar nada asintió y comenzó a correr a la salida de la oficina, tarea complicada con tacones altos y la falda algo corta pero increíblemente elegante.
—¿Y los modales? Wonyoung trabaja hace años con tus atuendos, podrías haberlo pedido mejor— arrugó un poco la frente y sostuvo el puente de su nariz tratando de apaciguar el dolor de cabeza que se aproximaba.
—Esta cumpliendo su trabajo y le pago para eso, aparte de que su sueldo es lo suficientemente bueno como para que se compre una tienda completa de ropa y que le sobre para un auto deportivo—se sentó en su escritorio y simplemente empezó a revisar papeles que dejaron en su oficina antes de la renuncia de su secretario.
—Simplemente opinó que podrías ser un poco más amable, miles de medio de comunicación incluyendo a Dispatch te tienen en la mira como un frívolo y egocéntrico. Realmente no creo que mientan, viendo lo que pasó con los últimos cinco secretarios y la manera en la que la prensa grabó tu actitud a Aisha en el último desfile en París... la gente estuvo especulando muchas cosas.
—Lo que ocurrió con los últimos inútiles que trajiste es que no cumplieron con mis expectativas, de igual manera ya no es nuestro problema, ellos decidieron irse por su propia cuenta—llevó a su boca un chocolate de la marca "Gucci" y mastico tranquilo, saboreando el sabor de este— Y lo que ocurrió con Aisha es simple, ella invadió mi espacio personal y puso en prueba mi paciencia.
—¿No se supone que son pareja? Digo, es normal que haya intentado tener unas buenas fotos para la prensa, después de todo no hubiera sido raro que ella se te pegara para tomarse una foto pero si tan solo no la hubieras apartado para entrar a la gala...
—Ese no es mi problema, somos dos profesionales las muestras de afecto en público no son de mi gusto.
—Las de privado tampoco, al parecer...—El castaño anarco una ceja ante la expresión de cansancio del chico.
—¿Qué se supone que es lo que quieres de mi?—Yeonjun prácticamente grito en un berrinche.
—Quiero a mi amigo de vuelta y no a este intento de playboy malcriado, quiero a ese chico dulce y tímido que no sería capaz de faltarle en respeto a nadie—Wooyoung suplico con la mirada, al igual que solía hacerlo cuando eran niños.
—Sabes perfectamente que ya no-...
—Te conozco perfectamente, practicamente somos hermanos y se que todo esto es una muralla que te obligaste a construir por lo que pasó con ella— Yeonjun parecía tener una mirada compasiva pero esta cambió a una de enojó drasticamente.
