08

35 5 0
                                    

Ya estaba acabando la primera semana de clases, era viernes, y Taemin debía admitir que había sido agotadora. Muchos proyectos y trabajos en grupos, por suerte estaba con sus amigos en la mayoría.

Jessica, por ser una chica dulce y muy atractiva, había atraído la atención de varios chicos y casi siempre la buscaban.

Taemin sonreía al ver lo bien que se habían adaptado. La única que no parecía feliz era su hermana, Krystal. Era una celosa de primera, decía que si su hermana se echaba novio la iba a olvidar completamente y nunca más tendrían una noche de videojuegos, pero Jessica le aseguraba que no iba a ser así.

Lo importante es que esa misma tarde era la tan famosa prueba para el equipo de fútbol americano y casualmente, después de haber escuchado a Jonghyun hablar sobre el tema, Krystal había decidido entrar también. Y ellos cómo bueno amigos debían de estar allí para apoyarla, la pobre Jessica también había sido arrastrada a la tortura.

Las gradas estaban casi vacías, habían algunos chicos riendo pero se encontraban en una esquina apartada, ya que todos los populares estaban vistiendo el uniforme deportivo o el traje de animadora.

También eran las audiciones para entrar al equipo de porristas. Estaban todas las chicas << que para el disgusto de Taemin y sus amigos eran atractivas >> entrenando en el campo. Habían franjas blancas pintadas en el césped y los arcos característicos a los dos extremos de la cancha.

Ellos estaban sentados en la primera fila.

Jinki hablaba con los demás mientras Taemin intentaba conversar tranquilo. Estaba nervioso, no sabía por qué, ya que por suerte Jinki lograba caerle bien a todo el mundo, así que cualquiera que no fuera del grupo de Minho, no le dejaría en ridículo. Intentó calmarse, debía hacerlo, pero justo cuando empezaban a relajarse los chicos y chicas salieron de los vestuarios, emocionados, mientras alzaban sus brazos al aire.

El problema no era el uniforme, el cual era una camiseta blanca y azul de tirantes que llevaba las insignias del colegio grabadas en dorado, o los pantalones anchos que caían levemente del trasero de los niños.

El problema era quien lo usaba y Taemin casi se quedó sin corazón al ver a Minho. Su cabello negro brillaba con el sol de un color más marrón y estaba despeinado mientras el uniforme se moldeaba en su cuerpo, resaltando la ancha figura del azabache, y la camisa << si es que podía considerarse una prenda de vestir >> dejaba ver sus brazos perfectos.

Taemin ni se molestó en disimular, observaba fijamente al azabache mientras él hablaba con sus amigos en el campo.

Krystal los saludó y también lucía muy bien con la ropa, pero ni Kibum o Taemin lo notaron del todo, ya que estaban concentrados en los dos chicos. Jonghyun vestía igual que Minho y hablaba animadamente rascándose la nuca.

Jinki seguía sorprendido de que Kibum aún no se hubiese desmayado.

- ¡Chicos! - Les llamó la atención y a duras penas sus mejores amigos lograron mirarlo. - Estamos aquí por Krystal, ¿lo recuerdan?

Taemin cabeceó como idiota, el aire no le llegaba a los pulmones. En cambio, Kibum escondió el rostro en sus manos y comenzó a bufar fastidiado.

Justo el azabache de ojos chocolate eligió aquel momento para alzar la mirada. Examinaba las gradas con desesperación, como si estuviera buscando a alguien, hasta que sus orbes se posaron en los profundos ojos marrones de Taemin. Minho intentó actuar indiferente y le sonrió hipócritamente mientras el pelirrojo echaba humo, ese niñito se estaba burlando de el y estaba dejando que lo lograra << Idiota, idiota >>

- ¡A sus posiciones! - Gritó la entrenadora y las animadoras comenzaron a formar un grupo.

Los jugadores, en la cancha, se organizaron en filas y comenzaron a jugar al escuchar el silbato. Era un juego amistoso pero daban la vida por anotar un punto. Era muy interesante, aunque Taemin quisiera seguirle el ritmo al juego, cada rato se distraía por los movimientos que hacía Minho junto a los demás. Corrían y se pasaban el balón de una manera muy brusca. Por parte de las animadoras, la mayoría de ellas saltaban haciendo piruetas y otras se hacían la estrella cantando lo siguiente:

Rivales.Where stories live. Discover now