nueva oportunidad- brittana

Capitulo 14

Cuando Santana despertó la mañana siguiente, tenía una enorme resaca, pero nada que una buena ducha no solucione.

Todavía no se animaba a abrir los ojos debido a que sentía a alguien acostada a su lado, mientras la abrazaba por la cintura.

Y por debajo de la remera.

Pero a decir verdad, ella sabía quién era, y por eso no quería moverse. Estaba disfrutando del contacto de la rubia con su piel desnuda.

Su mente se llenó de recuerdos de ellas dos abrazadas por la mañana a penas se despertaban, y sonrió. No existía nada que le diera más paz que dormir con ella.

Y extrañaba hacerlo cada día de su vida.

—Mierda— susurró cuando su celular sonó, y se estiró para alcanzarlo— López— volvió a susurrar.

—Soy yo. Está Carla esperándote para desayunar.

—Eh...— miró a la rubia quien seguía abrazándola, y suspiró— ¿Tiene que ser ahora, mamá?

—Si, y deja de susurrar, sabes que Britt no se despierta fácilmente— soltó.

—Pero...— estaba diciendo, pero su madre colgó— Mi dios.

Suavemente salió de los brazos de la rubia, y se dirigió hacía el baño de su habitación a darse una ducha rápida antes de bajar.

Santana no tenía ganas de hablar con Carla, no porque esté enojada, sino porque no tenía mucho tiempo antes de tener que irse, y sabía que la charla sería bastante larga y seria.

Además también estaba su ex esposa durmiendo en su cama, y quería seguir en ella.

Junto a ella.

—Buen dia— saludó a su mamá con un beso en la mejilla.

—Hola, cariño. Las dejo a solas— Santana asintió.

—Buen día— repitió esta vez para su ex novia, mientras se dirigía hacía la cafetera— ¿La mujer de ayer es madrugadora, eh?

—¿En serio te crees con derecho de hacerme un reclamo?

—Te pregunto exactamente lo mismo— contestó sirviéndose café.

—No es lo mismo.

—Si, ya se. Estuve mal, y lo admito. Pero no estamos juntas, Carla. Por el amor de dios ¿hacerme un planteo frente a todos mis amigos? ¿señalarme con el dedo frente a ellos? me quisiste dejar mal parada.

—Si— admitió— Estoy dolida, Santana. Te volviste a acostar con la mujer que me engañaste. ¡Y yo como una tonta por un llamado me tomo un avión para venir a hacerte compañía porque tu ex esposa está por casarse!

—Baja la voz— pidió susurrando— Y volviendo al pasado. Te fuiste del departamento gritando que todo había terminado, así que teóricamente no te engañé.

—¿Teóricamente? ¿en serio? ¿no sé te ocurrió otra excusa?

—¿Viniste a pelear?— preguntó apoyando su taza de café en la encimera— Porque tuve una muy mala noche, dónde me enteré de algo que no queria...

—Bienvenida a mí mundo— dijo sarcástica.

—Esto es peor. Y mí mañana estaba mejorando, hasta que un llamado me despertó para bajar a discutir con mí ex novia. Y sinceramente, no tengo tiempo para esto— negó con su cabeza— Tengo que armar las valijas y después irme a lo de Noah.

—Que poco te importa todo— negó con su cabeza mientras se dirigía al salón.

—¿Que poco me importa? ¡Carla, se casa mí mejor amigo! tengo que estar en su casa en un rato. No puedo estar deprimiendome, por lo menos hoy— respondió mientras la seguía.