꧁Cincuenta y ocho꧂

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                              Taeeun;

—¿Saldrás con Jungkook? —me pregunta Joy curiosa.

—Sí —asentí sonriendo—. Y deja de tener esa cara por favor.

—¿Que cara? —se hizo la inocente.

—Esa de "yo sabía que iban a terminar juntos" —contesté.

Ella soltó una risa —Es que, yo sabía que iban a terminar juntos –repitió y yo sonreí mientras negaba y me seguía preparando frente al espejo.

Luego de unos minutos ya estuve lista y me llegó un mensaje por parte de Jungkook, diciendome que ya estaba afuera esperando por mí. Me despedí de Joy luego de tomar mi cartera con algunas cosas necesarias y salí de mi habitación para dirigirme a donde Jungkook me debía estar esperando.

Cuando bajaba las escaleras, Rosé y Kyungwon venían subiendo. Y las dos me vieron con enfado, pero las ignoré. No iban a arruinarme la noche. Jungkook me esperaba junto a un auto rojo descapotable. Se veía tan apuesto arrecostado a este mientras me esperaba. Sonreímos al vernos.

—¿Me vestí bien? No me dijiste a donde iríamos —dije cuando llego a él.

—Estás hermosa de cualquier forma —respondió.

—¿A donde iremos primero? —pregunté curiosa cuando me abrió la puerta del asiento copiloto para que entrara.

Él cerró la puerta, rodeó el auto y se sentó en el asiento de chófer.

—Cenaremos primero y luego iremos a un lugar hermoso que quiero compartir contigo —me sonrió mientras terminaba de ponerse el cinturón de seguridad.

Sonreí ampliamente —Está bien. Suena lindo.

—Y lo es, preciosa —toma mi mano que estaba encima de mis muslos y entrelaza sus dedos con los míos haciéndome sonreír.

Sin dejar de tomar mi mano encendió el auto y salió por los portones del palacio. La verdad era tarde. O bueno...dentro de una hora más o menos, de seguro estaría anocheciendo.

Para cuando llegamos al restaurante ya era de noche. Jungkook salió del auto y me abrió la puerta de mi lado, tomando mi mano para ayudarme a bajar. Rodée con mi brazo correspondiente su brazo y nos acercamos a la puerta del restaurante que inmediatamente fue abierta y ambos entramos.

—Príncipe Jeon —fuimos recibidos por al parecer, el dueño del restaurante. Se giró hacia mi y me sonrió—, señorita Taeeun, posible princesa –eso me hizo sonreír y a Jungkook también–, ya tenemos su mesa preparada. Síganme por favor.

Ambos seguimos al señor hacia una mesa apartada, y discreta para tener más privacidad. No habían muchas personas en el restaurante, pero bueno. Jungkook y yo cenamos entre risas mientras nos contábamos cosas rándoms del otro. La verdad la cena solo estuvo invadida de recuerdos nuestros. Aunque él me insistió más en que le contara de mí, ya que quería conocerme muchísimo. Y según él, saber cada detalle de mi vida.

Dios... sonreía como estúpida cuando tomaba mi mano y me sonreía. Tenía que mover mi cabeza disimuladamente hacia los costados para salir del trance Jungkooktehipnotiza en el que entraba.

Pasamos bastante tiempo en el restaurante, y una vez satisfechos con el momento y la deliciosa cena nuevamente nos dirigíamos a su auto, para entonces ir al otro lugar, el cuál Jungkook me quería mostrar. Fue corto el trayecto, y al principio no entendía mucho que hacíamos, cuando caí en la cuenta que estábamos en un edificio que también era utilizado como mirador.

—¿Veremos estrellas? —pregunté en seguida al captar.

Él sonrió y asintió.

—Eres rápida en darte cuenta.

Príncipes del 97 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤  ✔Where stories live. Discover now