— Reese qué haces? — pregunta cuándo abro la puerta de su habitación.

Finalmente que la recosté en su cama, trató de ignorarla.

— Estas enojado, verdad? — pregunta. Aprieto mis ojos con fuerza para no saltar una estupidez.

— Duérmete ya Ginger.

Puso una de sus suaves manos en mi mejilla y dejó una leve caricia.

— Lo siento. — susurro.

— Lo hablamos mañana. — mi voz sonó bastante fría.

☽☽☽☽

En clase de cálculo la ignoré completamente y solía ayudarla cuando no entendía, pero esta vez no lo hice.

Gracias al timbre, salí rápidamente del aula y chocaba con algunas personas, lo cual ya no me importaba y quería evitar a Ginger por el día de hoy.

Me fui directamente a las gradas, subí los escalones y deje caer mi mochila a un lado.

Todos tratan de evitarnos a nosotros los Evans gracias a los tarados de William y Frederick.

Son muy problemáticos, si te metes con un Evans te metes con los otros tres.

Cerré mis ojos, intenté relajarme. Pero unos pasos subiendo a mi dirección y supe quienes eran.

William, Frederick y Craig.

— Ginger no está contigo. — William sonaba molesto — donde carajos está?

— No lo sé. — volví a cerrar los ojos — y me da igual.

— Eres idiota? — la voz de Frederick me hizo volver a abrir los ojos — porque mierda la dejas sola?

— Necesitaba espacio. — me encogí de hombros.

— Espacio?! — William soltó una carcajada sarcástica.

— No está sola y déjenla en paz. — solté.

— Que no está sola?! — soltó Frederick— y porque estás aquí sin ella?

— Ella está bien.

— Por supuesto! que estará bien, de puta madre. — William bajo los escalones de dos en dos y Frederick lo siguió, vi que se dirigían hasta el otro edificio donde estudia Ginger.

— Deberíamos seguirlos? — cuestioné poniéndome de pie.

— Son William y Frederick — Craig rascó su punta de la nariz — son muy capaz de incendiar el instituto si se trata de Ginger.

— Eso si. — reí por lo bajo.

— Vamos — palmeó mi espalda — antes de que ellos hagan una estupidez.

Bajamos de las gradas y nos dirigimos directo hasta el otro edificio, en cuanto llegamos había una bola de gente y pude visualizar a estos dos idiotas dándole una paliza al pobre chico.

The boys who lied +21Where stories live. Discover now