Daddy issues (bnha)

17

Hitoshi nunca había tenido la oportunidad de estar así con nadie y le fascinaba. Ver a alguien descansando con tanta paz cuando el no la había sentido en años le era emocionante. Lo que no sabía es que Denki tampoco había sentido tanta paz en años ya que realmente le costaba demasiado dormir pero esa noche había algo diferente; Hitoshi estaba allí. Consiguió dormir rápidamente, no se despertó a media noche, no sufrió insomnio; descansar con su amigo allí le hizo bien. Y a raíz de ello, ahora no parecía querer despertarse ni mucho menos. De igual manera, Hitoshi tampoco quería que pasase, sentía que podría estar así toda su vida.

Siguió acariciandole el pelo. Pasaba sus dedos entrelazandolos con sus cabellos y luego lo peinaba de nuevo así no le enredaba todo. En una de esas y por lo cerca que estaba su mano de su rostro, la pasó sin querer por una herida que parecía tener en su mejilla. No era grande ni nada, pero parecía profunda y reciente, haciendo que abriera los ojos automáticamente. No le había dolido, pero si ardía bastante y eso había terminado por despertarlo.

—Lo siento... —Denki lo miró confundido, no entendiendo cómo llegó su mano allí de todos modos —Estaba tocando tu cabello.

—Oh... —Se quedó pensando por unos segundos, aún con la mano del contrario sobre su cabello. De repente, tomó consciencia de sus alrededores y abrió los ojos como platos cuando notó que su mano estaba sobre la cintura de Hitoshi —¡Oh! —La quitó inmediatamente y giró sobre si mismo, dándole la espalda al su amigo —¡Lo siento! —Estaba rojo.

—No me molesta —Hitoshi río al ver su exagerada reacción. Denki, al oírlo, se dio vuelta de nuevo y se miraron. Ambos estaban recostados en un costado y su cabeza aún seguía en la almohada. El rubio sonrió.

—Tus pestañas son largas —Denki parecía estar analizándolo, como queriendo atesorar aquella imagen por siempre.

—Tus... —Labios. No iba a decir nada al respecto; se arrepintió.

—¿Qué?

—Nada —Hitoshi procedió a levantarse, dejando al rubio con la duda. Denki también se levantó, intrigado.

—¡Dime!

—No —Comenzó a caminar, amagando a irse de la habitación, por lo que Denki le saltó encima.

—¡Vamos! ¡No seas así! —Se estaba divirtiendo. Hitoshi terminó por rendirse a raíz del peso que el rubio estaba ejerciendo sobre su espalda y se sentó en el suelo, esta vez, con el rubio colgando aún de ella. Denki, por otro lado, terminó por soltarlo y se sentó frente a él, expectante.

—¿Que te pasó en el rostro? —Cambió de tema.

—¿Esto? —Se tocó la herida con delicadeza para señalarla. Hitoshi asintió —Uno de los villanos llegó a tocarme con un cuchillo —No había tenido mucho tiempo para ver cómo iba Denki en la pelea, pero confiaba en él así que en su momento no estaba preocupado —¿Y tú? ¿No tienes ninguna cicatriz de chico malo como la mía?

—De hecho, si tengo —Denki observó atento como Hitoshi bajó la cabeza, dejando al descubierto su nuca y corrió su cabello, mostrando una cicatriz lineal que cruzaba de lado a lado. El rubio tocó la herida como si fuera lo más frágil del mundo, causándole un escalofrío al contrario, a quien ya, por obvias razones, no le dolía pero aún le seguía extrañando el tacto en aquella zona.

—¡Es genial! —Hitoshi rió por la extraña reacción. Denki quitó su mano y el contrario volvió a elevar la mirada —¿Que te pasó?

—Tenía 6... Creo... —Se rascó un poco la nuca, recordando —Unos villanos me quisieron secuestrar, realmente no recuerdo porqué o si había alguna razón pero mi papá saltó a defenderme y lo amenazaron con matarme si no se quedaba quieto —Hizo silencio para intentar acomodar la historia como realmente era. Considerando que era pequeño los recuerdos se le mezclaban —Al intentar salvarme, me cortaron un poco el cuello para corroborar su amenaza —Otro silencio —Luego de eso me desmayé creo; no recuerdo más. Pero mi papá me salvó y por eso estoy aquí ahora, es lo único que se.

—¡Tu papá debe ser increíble!

—Lo es... —Sonrió.

Denki, olvidando totalmente por qué lo había perseguido antes, se levantó y Hitoshi solo lo persiguió con la mirada. Comenzó a realizar su rutina de todos los días bajo la observación de su amigo mientras intentaba hacerlo reír a base de bailes "sexys" y striptease novato y así, ademas, el de ojos morados iba recordando que tenía que hacer en la mañana, como si estuviera repasando. En cuanto su amigo tomó algo de ropa, recordó que debería preocuparse por su identidad. Sintió como un sudor frío lo recorrió de arriba a abajo; había sido muy descuidado.

—Denki, me voy a mi cuarto —Se había puesto un tanto serio, pero lo disimuló —Llegaré tarde a prepararme para clases sino —Mintió; ni siquiera tenía que ir porque estaba suspendido. Luego le diría que decidió quedarse durmiendo o algo así.

Con eso, rápidamente se despidió de Denki, quien quedó un poco extrañado por lo apurado que parecía de repente pero estaba demasiado feliz como para preocuparse, y salió de allí para dirigirse a su propia habitación.

Ya podía caminar mucho mejor; Recovery Girl era definitivamente buena en lo que hacía.