x. ¡LARGA VIDA AL REY!

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CORONACIÓN.

Castillo Peverell, Escocia.
15 de Julio de 1966.

Les diré algo.

Yo pensaba que una coronación era que te entregaban una corona, decías un juramento y ya.

Pero no. Vaya que no lo es.

Es una completa locura, cuando me quedé a ver a mis hermanos en duelo, no caí en cuenta en detalles y ¡que detalles!

Como por ejemplo el vestuario, es una tontería, pero muy importante. Harry Potter en su vida pasada puede que no le importase y fuera a una coronación con las ropas de Dudley, rotas y viejas... pero Harrison Peverell NO.

Menos mal que en el palacio, en la semana en que los Potter se quedaron, conseguimos personal, humano si se preguntan.

Modistas, Maestros, Jardineros, Escoltas, Cocineros, Personal de Limpieza, Cuidadores de las criaturas del bosque, hasta cuidadores de carruajes.

En total en el castillo trabajan por lo menos 100 personas. Esta decisión la tomo Hermione, ya que detestaba que los elfos hicieran todo esto y yo por supuesto le di la razón.

Nuestra modista se llama Elizabeth, de sobrenombre Eli. Todo el mundo la llama así, yo mismo le cree un apodo, Beth; es más elegante y más presentable.

En fin, el caso es que Beth sin que yo se lo pidiera realizó cinco atuendos para la tan aclamada coronación. Cinco atuendos espectaculares, cuando salí de la sala de duelos me la encontré y ella me pidió que la siguiera. Yo como todo caballero lo hice y vaya sorpresa. Para comenzar Beth me hizo acordar de detalles que olvide para este día y me sorprendió lo que ella hizo por mi, bueno por todos... porque hizo vestuarios para todos, Los Potter y los Peverell.

—¿Hiciste todo esto en que... dos semanas? —. Le pregunté incrédulo, cinco atuendos para cada miembro de la familia que serian cuarenta prendas que ELLA realizó en menos de un mes.

—Yo... si, si lo hice Majestad—. Confesó tímidamente.

Yo de verdad que la admiro, Elizabeth es una persona muy capaz de trabajar, salió hace poco de Hogwarts y buscaba oportunidades de empleo en moda. Por lo que Hermione y Daphne la contrataron, tiene diecisiete años, pelirroja de ojos cafés y muy cálida. Siempre carga unas gafas de montura delgada con una lupa y agujas, es un milagro tenerla.

— Te pagaré el doble—. Le dije como si hablase del clima embobado y demasiado incrédulo, mirando los fantásticos trajes que realizo.

Escuche un jadeo y se que es de ella porque le pagamos al mes medio millón de galeones, pero eso no es un inconveniente para nosotros.

Detalle los trajes con ojo critico y me quedó gustando uno de color blanco, tenía camisa de seda verde oscura con botones negros, pantalón blanco y el saco blanco con toques negros y hombreras, zapatos negros, una corona falsa adornaba la cabeza del maniquí y traía una banda que rodeaba el pecho y torso, recitando 'Rey de la más antigua y Noble casa Peverell, Duque de Gran Bretaña'. En definitiva me encanto.

— Quiero este Beth— Pedí suavemente señalando el traje.

Ella asintió y corrió encantada para retirarlo con ayuda de las ayudantes que ella solicito que son diez para toda la familia.

𝐔𝐍 𝐕𝐈𝐀𝐉𝐄 𝐄𝐍 𝐄𝐋 𝐓𝐈𝐄𝐌𝐏𝐎 | 𝐇. 𝐏𝐎𝐓𝐓𝐄𝐑Where stories live. Discover now