⋆.*♡ゞAU. ˚༘✧ ❛°•
─╰* . JAYROY .° •╯─
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Roy se levanta temprano en la mañaa decide sentarse en la hierba y disfrutar del amanecer. Sin embargo, su mañana da un giro inesperado para mejor.
5:50 am
Roy se quedó donde siempre estaba tan temprano en su taller. Disfrutaba de la paz y la tranquilidad. Momentos como estos eran bastante raros por aquí con la cantidad de bocas ruidosas y machos alborotadores que generalmente corrían por la nave. Se sentía mal por todas las cosas que su precioso ángel, Kory tenía que soportar por aquí, aunque ella fuera ruda.
Se movió de su taller hacia la cocina para preparar una masa de panqueques para cuando sus compañeros de vigilancia decidieran levantarse de su letargo. Sin embargo, eso no sería por un tiempo. Colocó su masa terminada en el refrigerador, lista para usarla más tarde.
Sintiendo que no tenía sentido volver a dormir, Roy se dirigió al exterior. Se sentó en un parche de hierba, apoyó la cabeza en las rodillas y respiró hondo varias veces. Se sentía inquieto, una señal para que encendiera un cigarrillo a pesar de que la brisa de la mañana lo hacía bastante difícil. Ahuecó su mano alrededor de la llama, impidiendo que el viento la apagara.
Dio una larga calada mientras veía salir el sol. Luego notó un movimiento en la hierba. Y ese sería Red Hood. ¿Qué estaba haciendo tan temprano?
"Oi, Jaybird," dijo Roy mientras levantaba la mano para señalar su paradero.
Jason no respondió, sin embargo, miró en su dirección y gruñó, caminando lentamente hacia el lugar que Roy había reservado para sí mismo originalmente. Continuó avanzando hacia él hasta que se dejó caer suavemente junto al arquero.
Jason se frotó los ojos mientras bostezaba. "Roy" dijo Jason mientras comenzaba a acostarse y colocaba las manos detrás de la cabeza.
Roy se sintió desconcertado por esto. Todo lo que salía de la boca de ese petirrojo solía ser una mierda. No podía recordar la última vez que Jason había usado su nombre real, mejor aún, no quería admitir que le gustaba cuando lo hacía.
"¿Estás enfermo o algo? Te ves más pálido que de costumbre" Jason tarareó. Esto le valió un codo débil en la costilla. Continuó observando a Roy cuidadosamente mientras procedía a acostarse a su lado.
Mientras Roy estaba acostado, decidió enfrentarse a Jason. Jason correspondió a su acción y rodó sobre su costado para enfrentarlo.
Se sintió extraño para los dos hombres. Acostados uno al lado del otro mientras salía el sol. El contacto visual también era nuevo, sin mencionar que eran tan cercanos. Los dos yacieron allí en silencio, orbes azules mirando fijamente a los de bronce.
"Jay-bird" susurró Roy en sílabas.
Lo que sucedió a continuación no fue lo que Roy esperaba. Jason dejó escapar un profundo suspiro y se acercó más a Roy; permitiendo que su cabeza se apoye en el pecho del arquero pelirrojo. Aunque fue inesperado y muy diferente a Jason, se permitió relajarse en esta posición bastante íntima.
"Sabía que tenías una debilidad por mí en algún lugar de ese cerebro de guisante tuyo", se rió Roy mientras, experimentalmente, peinaba suavemente sus dedos a través del sorprendentemente suave cabello de más alto. Jason dejó escapar algunos gruñidos mientras lo hacía.
Fue algo extraño. Los dos se hacian bromas de mal gusto comentarios groseros constantemente cuando estaban juntos, pero él no pudo evitar sentir que era un acto frente a los otros. No siempre tenían que estar en la garganta del otro. Tuvieron muchos momentos de cortesía cuando estuvieron solos, pero ninguno de ellos fue así. Esto se sintió íntimo.
No podía negar que se sentía atraído por el antiheroe. De hecho, no fue abierto sobre su sexualidad con sus compañeros de vigilancia ni con nadie. Realmente no sabe por qué no les ha dicho que es bisexual. Simplemente se imagina que les dirá cuando sienta que es el momento adecuado.
Roy estaba a punto de apoyar la cabeza en la de Jason, pero en cambio, Jason lo miró con la sonrisa más gentil que jamás había visto llevar al hombre. Se quedaron así por un momento, examinando y observando los rasgos faciales del otro. Roy descubrió que Jason tenía una cara bastante linda cuando no estaba en su constante estado de fruncir el ceño.
Jason luego se niveló con Roy, de modo que tuvieran la misma altura. Estaban extremadamente cerca en este punto, sus cuerpos estaban casi completamente en contacto entre sí.
Roy podía sentir que su rostro se calentaba y rápidamente se volvía de un profundo tono rosa. Jason sonrió con satisfacción ante esto y se acercó aún más al pelirrojo, colocando un suave beso en su mejilla.
Cuando Jason se apartó, Roy lo miró aturdido y lujurioso a los ojos. Envolvió sus manos detrás del cuello del de mechon blanco, cerrando el doloroso espacio entre los dos cuando sus labios ligeramente agrietados entraron en contacto siendo sorprendentemente suaves.
Los ojos de Jason se abrieron un poco, un rojo rosado le dio vida a su rostro bronceado mientras cerraba los ojos y se relajaba en el beso.
Jason colocó perezosamente sus manos en las caderas de Roy, trazando lentamente sus dedos hacia los lados de su torso, deteniéndose ocasionalmente para mantenerlo quieto. Los brazos de Roy se enredaron alrededor de Jason, trazando círculos en su espalda mientras gentilmente se apartaba del beso, sintiéndose sin aliento. Sus frentes se tocaron cuando recuperó el aliento.
"¿Así que te he llegado a gustar, arquero de mierda?" Jason dejó escapar entre respiraciones. Roy simplemente le sonrió y frotó la parte de atrás de su cabeza, descansando su peso contra el de Jason en un abrazo perezoso pero reconfortante.
Los dos comenzaron a quedarse dormidos en un cómodo estado de sueño.
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"¿Jason? ¿Roy?" Dick dijo en voz baja, aparentemente apareciendo de la nada, haciendo que los dos hombres mayores se separaran, tosiendo ante la repentina aparición de su amigo/hermano acrobata.
"¿Puedo unirme al abrazo también?" El mayor dijo como si se sintiera solo.
Jason miró a Roy brevemente, le sonrió gentilmente al pelirrojo. Él se rió entre dientes antes de contestar un, "Pudrete, Dickface".
