Sara tendrá que enfrentarse a pruebas que Dios pondrá en su camino, tendrá que recordar quién es ella y cuál es su vida debido a un trágico accidente.
Tendrá que encontrar su camino para así poder recordar su vida pasada y poder volver al lugar del...
Veinte de Julio, lo que significa cumpleaños número diecisiete de Sara. Jessi, Emma, Ruby, Ada, Jason y yo nos encontrábamos preparando una fiesta sorpresa para Sara, solo estaríamos nosotros con Sara pero igual, queríamos que fuera especial. Y vaya nuestra suerte, era sábado por lo que podríamos salir y entrar al colegio cuantas veces quisiéramos.
-¿Están bien colocadas las letras?-preguntó Jessi con el ceño fruncido mientras miraba el letrero que decía "Feliz Cumple Sara".
Los chicos y yo nos acercamos a ver y todos le dimos el ok.
Seguimos ordenando, habíamos comprado un pastel, y globos para decorar.
-Miren, trajeron las galletas- dijo Ada poniendo en la mesa unas galletas de color celeste y azul.
-Estoy seguro de que esto le gustará a tu novia- dijo Jason, todos lo miramos asombrados.
-Ella es solo mi amiga- reí, Jason nos miró asombrado y luego rio.
-Disculpa amigo, no lo sabía- Jason me caía bien, y compartíamos tiempo juntos pero al parecer este era un poco distraído o no me escuchaba bien.
Terminamos a eso de las tres de la tarde, decidimos volver al colegio ya que dónde le íbamos a celebrar a Sara era en la casa de Ada, sus padres habían accedido sin problema alguno.
-Bien, vayan a prepararse, nosotras haremos lo mismo, y Ruby le dirá a Sara que vayan de compras y ya saben el resto del plan, en una hora estaremos todos allá y Ruby con Sara llegarán minutos más tarde- dijo Jessi y todos asentimos y nos dirigimos a nuestras habitaciones.
~Sara~
Desperté y lo primero que hice fue agradecerle a Dios por un año más de vida, y por todo lo bueno que me había dado.
Luego me levanté y me di un baño, me pareció raro no ver a Ruby, este día ella se levanta tarde aprovechando que no hay clases, aún así seguí con mi rutina. Me puse un vestido verde, me peiné y luego bajé al comedor.
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Algunas chicas de mi clase se acercaron a felicitarme y algunas hasta me dieron regalo.
Me fui de nuevo a la habitación, justo cuando entré mi teléfono estaba sonando, era mamá quien me hacía una videollamada.
-Hola mamá- dije sonriendo al verla a través de la pantalla.
-Feliz cumpleaños cariño-dijo con efusividad-te amamos.
-Felicidades mi princesa-dijo mi padre sonriendo.
-Gracias, los amo-sonreí.
Estuvimos hablando por un largo rato, ellos estaban muy felices porque a pesar de todo lo ocurrido aquí estaba, cumpliendo diecisiete años gracias a Dios.
