El amor y la guerra

Torneo I

Era de mañana. El día mas esperado para todos los caballeros y príncipes, estaban listos para el gran torneo.

Midoriya no pudo ver a All Might en toda la mañana ni a ninguno de los sirvientes ya que todos estaban muy ocupado preparando la zona de combates.

Todos los caballeros se encontraban en sus vestidores para prepararse para el combate.

Había tanto caballeros como príncipes y princesas, muchos de ellos casi entrenados desde nacer para ser los más fuertes guerreros, y claramente esto hacia sentir más nervioso a Midoriya ya que él solo llevaba seis mese de entrenamiento.

Sabía que no podía ganar el torneo pero aún así debía posicionarse en los últimos lugares para al menos mostrar que tenía la fuerza mínima para ser el heredero de ese reino. Tenía mucho que demostrar ese día.

Pero no solo el estrés pasaba por su mente ya que también pensaba en su amigo Shoto.

No quería pensar en la tortura que debía estar pasando, quería salvarlo lo más pronto posible. Incluso ya tenía un plan de que hacer cuando lo recuperara, el chico lo ocultaría en el castillo y en sus tiempos libres iría con él, convencería a All Might de que lo dejara convertirse en un caballero, así podrían pasar tiempo juntos, leerían libros y pasarían horas hablando. Justo como lo hacían en el escondite.

Según los rumorea, se decía que el rey lo llevaría como si fuera una mascota para mostrar su poder. Midoriya estaba enfadado ante la idea de que vieran a su amigo como un monstruo. Tenía que salvarlo.

Las personas iban entrando y sentándose en los asientos esperando ver las batallas . Los reyes estaban en tronos especiales, cada asiento tenía algo característico sobre cada reinó. El trono de los Yaoyorozu estaba hecho de oro y diamantes incrustados, el de los Bakugo estaba hecho con pelaje de dragón con una cola de este colgando de la parte trasera del asiento, también estaba el del reino acuático que tenía agua por debajo con un trono hecho de nenúfares. Pero el que le importaba a Midoriya era ver el de el reino de fuego, el cual estaba cubierto por fuego que parecía nunca apagarse, debí tener algún hechizo.

Los reyes se iban formando de uno a uno en sus respectivos tronos, pero Midoriya solo centró su atención en el trono de fuego. Algunos reyes llevaban "mascotas" acompañándolos pero Endevor no tenían ninguno a su lado.

Eso significaba que su plan no saldría como esperaba.

Pero no pudo ver más ya que y todos los chicos fueron pasando a sus respectivos vestidores para que tomaran sus espadas y armaduras.

Midoriya se preocupó un poco al ver a tantos chicos. Más fuertes y con más experiencia que él.

El pecoso  iba a pasar al suyo pero el rey Yagi aprovechó esto para llamarlo ocultándose de tras de una cornisa.

El chico lo vio y se acercó.

All Might:- cómo estás?—

Midoriya:- nervioso—

All Might:- el One for All debería estar ya adaptándose a tu cuerpo, pero aún así no te confíes. Aun te puedes desmayar o lastimar en cualquier momento.—

Midoriya:- tendré cuidado—

All Might:- si sientes que ya no puedes luchar o te lastimas demasiado puedes rendirte. No me enojare, prefiero eso a que te pase algo malo—

Midoriya:- Gracias. Pero no se preocupe, las últimas semanas ya lo pude controlar un poco mejor.

All Might:- buena suerte—puso su mano en su hombro para mostrar apoyo.