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02:──Ensayo

—Así que...¿Si sientes miedo otra vez, seguirás con el papel de que solo es un ensayo?

—Sí, ¿crees que es absurdo, Akkun?

—¿Qué? ¡Para nada!—rió nervioso.

Takemichi suspiró—Sabía que sonaba absurdo.

—No, no, no, mhm, bueno, sí es algo absurdo, pero si eso te ayuda de algún modo en confesar tus verdaderos sentimientos hacia Mikey, está bien.

—Me alegra que pienses así—le dedicó una sonrisa cálida.

El resto del día transcurrió como normalmente pasaba, clases para nada interesantes, conversaciones simples pero divertidas en el receso.

Aunque, sí debía admitir que estaba ansioso por la hora de la salida pues dicha hora Manjiro iba a recogerlo para tener el primer ensayo que habían coordinado el día de ayer.

"Ugh...el día de ayer, fue un total asco, ¡pero esta vez será diferente!, ¡esta vez sí lograré declararme!"

Sin embargo, como es bien sabido, es más fácil decirlo que hacerlo.

Takemichi estaba inmerso en el mundo de los sueños hasta que sonó el timbre, anunciando que era hora de que los estudiantes regresaran a sus respectivos hogares.

Gracias al timbre, saltó de su asiento haciendo que sus compañeros se rieran de él.

Avergonzado, bajó la cabeza y guardó sus cosas dentro de su mochila.

—¡Hey, Takemichi!—dijo Hakkai entrando al aula, que poco a poco se estaba quedando vacía.

Se dio cuenta que no venía solo, lo estaban acompañando Chifuyu y Hinata.

Los saludó con una sonrisa.

—Chifuyu nos contó sobre...ya sabes quién.—dijo Hinata mirándolo con un poco de picardía a Takemichi.

Tragó en seco, le dio una mirada rápida al mencionado pero este evitó el contacto visual.

—No te enojes, ¿si? Se los conté porque me pareció que serían de gran ayuda, es decir, mientras más alguien tiene ayuda las posibilidades de resolver un problema son máximas.

Suspiró.

—Bien, bien, pero será en otra ocasión, está a punto de llegar.

—¿Quién? ¿Eh?

—Hina, por favor—se cubrió el rostro avergonzado, que su amiga de la infancia supiera de su enamoramiento por alguna razón le era embarazoso, sin embargo, algo le preocupaba, no sabía si ella estaba molesta con él por no decirle algo tan esencial como eso ya que entre ellos casi no habían secretos, como le intrigaba saber qué era lo que pensaba Hinata, decidió que iba a tener una conversación más tarde con ella.

Sus amigos se terminaron yendo no sin antes decirle "Buena suerte".

Takemichi se apoyó en uno de los escritorios del salón esperando que Manjiro apareciera por la puerta, y así fue.

Al verlo, le sonrió diciendo:—Hola, Takemicchi.

Nervioso, le saludó también, repentinamente le dio incertidumbre preguntarle acerca de lo que habían hablado ayer ya que no sabía si se acordaba de lo coordinado. El miedo recorrió todo su ser hasta que la voz del contrario lo sacó de sus pensamientos.

—Ya estoy aquí, así que, ¿no te parece que podríamos comenzar con el ensayo?

—¡Por supuesto!

Manjiro se acercó a él, haciendo que se formara un mínimo espacio entre ellos dos, Takemichi podía escuchar perfectamente la respiración de Manjiro.