Demon and Mortal Love...♥

"LA VERDAD Y NADA MAS QUE LA VERDAD"

Camine hasta llegar a mi habitación, entre y cerre la puerta con seguro, sabía que eso no me detendría de lo que estaba por venir.
Observe la luna... era una grande y brillante luna llena, estar aquí habían convertido escenarios completamente irónicos, la luna me recordaba aquel día.

Mei no es mi hermana.
El collar, el regalo de mi supuesta familia; mis padres que en realidad me usaron y mintieron, solo para llegar a su objetivo: el día en que me convirtiera en la Reina, mi Padre sería capaz de seguir en reinado después de sustituir a mi abuela. Solo para después deshacerse de mi, y reclamar el trono.
Esos eran los pequeños fogonazos que lograba recordar forzosamente.

-¡Maldicion!_ tire de las gruesas cortinas.

Las sábanas de la enorme cama se encontraban en el suelo, unos cuantos muebles fuera de lugar, cuadros rotos. Me desplome al suelo y tome el collar en mis manos y lo junte hacia mi pecho.

"Una mala y horrible pesadilla"

Mire por la ventana, esperando el amanecer para poder desaparecer.

(...)

-Bochan, es hora de despertar..._ dijo abriendo las cortinas.

-¿Por qué tienes la costumbre de despertarme de esa manera?_ se quejó.

-Es la única forma de despertarlo, tiene sueño pesado..._

-Bien, ya entendí..._

-Debe estar hambriento, no ha comido nada desde ayer_

-Si..._

-Debe cambiarse y después bajar a desayunar... ¿le apetece tomar un baño antes que nada?_ asintió.

-Su dolor, ¿ha desaparecido?_

-Por ahora, no duele_

|Ciel|

Sebastian me ayudo a levantarme y nos dirigimos hacia la puerta que conducía al baño. Él preparo la tina y me despojo de mi bata y del parche que seguía cubriendo mi ojo. Al mirarme en el espejo mi vista se clavo en algo nuevo, en mi brazo derecho yacía una marca color carmesí, desde una parte de mi hombro hasta mi codo.

-¿Qué es esto?..._ fruncí el ceño y mire a mi mayordomo.

No le permití hablar y proseguí a preguntar.

-¿Qué sucedió mientras estaba dormido?_ pregunte enojado.

-¿No lo recuerda?_ volví mi vista al espejo y observe la marca.

-Una chica, cubriendo mi ojo y dolor..._ él se colocó detrás de mí.

-Esa chica es My Lady..._

Se dedicó unos momentos a contarme todo, yo miraba la marca en el transcurso de la historia.
Ella nuevamente me había salvado, esta marca, era una prueba mas, ella siempre estaría conmigo... no tiene sentido.

-Prepara el desayuno, y antes trae a ________, estaré en mi despacho_

-Entiendo. Debo informarle que My Lady salió esta mañana_

-¿A donde?_ rodé los ojos.

-No lo mencionó_

-Avísame cuando regrese, tengo que hablar con ella_

-Como ordene_

|Fin Ciel|

(...)

El primer rayo de luz era mi señal para irme. En este día mis poderes están fuera de mi control. Aprendí eso en el laboratorio, y con el paso de los años este día la habitación metálica en la que me encontraba cautiva era reforzada y tomaban medidas de seguridad para contenerme. Parecía ser un día peligroso pero el científico a mi cargo aprovechaba hacer nuevas pruebas con increíble cuidado.
Hoy había un eclipse y debía ir a buscar un lugar en donde mantenerme alejada hasta regresar. Sabía que era lo que pasaba y esta vez no me rodeaba una habitación resguardada y personas que supieran del tema para someterme.

Me dirigí a la salida, no podía arriesgarme a utilizar mis poderes demoniacos. Solo tenía que aguantar hasta que el eclipse pasará y solo así podría volver a la mansión.
Lo común en este día es que termine totalmente agotada, para un demonio no es bueno no utilizar sus poderes, es agotador, inclusive hay enfermedades que pueden atacarnos, la mejor oportunidad en donde somos vulnerables a todo. La mejor oportunidad que tenían en el laboratorio para hacer un sin fin de pruebas aún si se arriesgaban a que algo saliera mal.
No todos los demonios lo afrontamos de la misma manera, demonios como Sebastian han aprendido a controlarse.

(...)

|Ciel|

-Lady Elizabeth vendrá hoy a visitarlo y se quedará aquí hasta mañana..._ dijo retirando el plato ahora vacío.

-¿Por qué tan derrepete?_ suspiré.

-Olvide mencionarlo, hoy habrá un eclipse solar, y al parecer Lady Elizabeth quiere observarlo con usted_

-Un eclipse solar, ¿por qué tiene que quedarse hasta mañana?_ no tengo tiempo para soportarla.

-Eso se lo tendrá que preguntar usted mismo..._

-Bien, prepara todo, no tardará en llegar_ suspire nuevamente.

-Cómo ordene_ hizo una reverencia.

|Fin Ciel|

Hola mis Neko
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