Vidas cruzadas: El ciclo. #1 TERMINADA +18. BORRADOR

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—Sí, tan solo...Realmente quería hablar con usted.

—Dime.

Cate tuvo que pensarlo por algunos minutos antes de reunir el valor para mirarla a los ojos y rogar por su ayuda. Aprovechó la llegada de Edgar con una bandeja con aperitivos y el té para evitar hablar y usó eso como excusa para prolongar el silencio en lo que se servían.

—Ha sido muy amable conmigo, toda su familia de hecho y detesto abusar de la amabilidad, pero Susan necesita recuperar su espacio y aunque no me dirá nada, sé que está cansada y mi presencia solo representa una carga en sus días y con mi hijo es peor... —. Olivia la escuchó en silencio y comprendió a que se refería, Susan debía estar cerca de los setenta años por esas fechas—. Esperaba poder trabajar para usted y hospedarme en la casa, mi hijo y yo podemos compartir dormitorio y él puede trabajar también.

—No digas payasadas, Cate, eres bienvenida a vivir con nosotros sin necesidad de trabajar.

—No deseo recibir más caridad que no merezco, señora y con todo respeto le digo que agradezco todo lo que ha hecho por mí, pero deseo poder ganarme mi lugar como todo el mundo.

La determinación con la que le habló, hizo que Olivia dudara su próxima decisión. Quería insistir en que podía vivir con ellos sin necesidad de trabajar, pero al mismo tiempo sentía que insistir ante su seriedad podía ser grosero o que la presionaría a ceder a algo que Cate no quería.

—Extraño a mi marido profundamente y la mujer que era cuando estaba con él, pero debo aceptar que él se ha ido y también esa mujer, no tengo un título o una voz, soy solo una simple viuda con un hijo al que cuidar y aunque agradezco el apoyo que he recibido con todos en White Oak y su familia, es momento de que tome control de mi vida, señora y empiece a ganar dinero para mi hijo.

—Cate... —susurró y tomó su mano, lamentando que no le dejara otra opción—. Realmente desearía que aceptaras vivir con nosotros como parte de la familia.

—Lo sé y le agradezco, pero quiero sentir que merezco el lugar que tengo, así que le pido por favor un puesto entre sus sirvientes, le aseguro trabajaré muy duro.

Se sintió un tanto emocional con la situación y no pudo contener sus lágrimas por mucho tiempo. Cate había perdido todo con la muerte de Nolan, no solo su marido y compañero, sino también su voz, su economía y la vida que alguna vez había podido disfrutar. No debía ser fácil imaginaba y sentía demasiada angustia por ella e impotencia al no saber cómo mejorar su vida.

Apretó su mano en la suya y sonrió.

—No debes pedírmelo dos veces, Cate, por supuesto que te daré un trabajo si es lo que deseas —. Le alcanzó el platillo con la taza de té y tomó el suyo—. De hecho, llevo ya algunas semanas en busca de una ayudante, pero es un puesto tan intimo que me resulta difícil aceptar a cualquiera, ¿te interesaría el lugar?

—Por supuesto, me encantaría.

—De acuerdo, eres bienvenida a empezar cuando gustes y tú y tu hijo pueden vivir aquí...Charlotte te enseñará el dormitorio, ella es la ama de llaves —. Dejó la taza en la mesilla y fue hacia la cinta que colgaba del techo junto al librero para tirar de esta y hacer sonar la campana en el salón de sirvientes—. Y por favor, no hace falta que Timmy trabaje ¿sí? Enfoquémonos en su educación.

—Gracias, realmente muchas gracias.

La abrazó sin poder contenerse y Olivia sonrió y acarició su espalda intentando consolarla.

La puerta se abrió y uno de los mozos asomó para prestar sus servicios.

—Fletcher, podrías pedirle a la señora Mitchell que le preparé a Cate su nuevo dormitorio, será mi ayudante de ahora en más.