Capítulo 84: Vínculo

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La respiración del mencionado quedo atrapada en su garganta ante eso, sintiendo como sus manos temblaban levemente...

- En realidad... no estaba esperando que las cumplieras - espeto, aunque no sonó como quería... no, solo logro que Dazai lo mirara ofendido - ¡Espera! ¡No es que creyera que besaras tan mal! - aprendiendo de su hermano, simplemente cerro la boca, no se iba a enterrar aun mas bajo el suelo - ¡Bien! ¡Como sea! - espeto fingiendo valentía, cerrando sus ojos con fuerza

- No te voy a comer, no hagas esa cara - espeto riéndose Dazai, dejando ir su mentón para delinear los rasgos de su compañero con la punta de sus dedos - Relájate, Chuuya - susurro con cariño frotando sus narices junta logrando que el pelirrojo suspirara contra él permitiendo que su rostro se relajara más cómodo - Bien hecho - sin atrapo los labios de su compañero en un beso suave, solo comparable al cálido roció de la lluvia que logro que el pelirrojo se aferrara a la ropa de Dazai, sin haber notado en que momento dejo de aferrarse al cuello de este. Sus manos temblaban y su corazón parecía querer explotar, pero no podría desear algo mejor o un mejor momento.

Dazai mordió con suavidad los labios de su compañero pidiendo un permiso tácito para profundizar, en realidad, podría fingir estar bien... que no estaba nervioso... que su cuerpo no se estremecía ante el dulce sabor de los labios de Chuuya, pero su corazón lo sabía mejor, sabia mejor lo desesperado que estaba por perderse en su compañero, sobre como sus manos temblaban casi imperceptiblemente por querer aferrarse aún más... no era su primer beso, no podría decir algo así, pero, si era el primer beso que anhelo desde lo mas profundo de su ser, casi moviendo los cimientos de todo lo que construyo, si alguna vez tuvo mas besos simplemente se olvidaron con el poder destructivo que tenía Chuuya sobre él... Si, definitivamente subestimo lo que iba a ser besar de verdad a su compañero.

El pelirrojo se estremeció al sentir como las manos de Dazai se alzaban hasta deslizarse por su cuello, apretando suavemente con los pulgares, se sentía extraño... pero... estaba bien, estaba bien, podía confiar en él, podía cambiar aquellos recuerdos dolorosos por los que creara junto a su compañero... poco a poco hasta que pudiera rozarlo con sus labios sin evocar malos momentos. Las manos de Dazai bajaron hasta sus hombros, deslizándose por sus brazos hasta poder aferrarse de nuevo a la cintura de Chuuya, atrayéndolo contra él justo en el momento en que este abría temblorosamente sus labios

La boca de Dazai sabia dulce, un sabor que realmente quería recordar para siempre, junto con aquella suavidad y calidez que lo hacia querer jadear, pero sin poder llenar sus pulmones del aire que se le había sido negado producto de la desesperación con la que estaba siendo besado por Dazai, trato de aferrarse a los detalles del momento, pero muchos se perdieron por la cantidad, dejándolos escurrirse de su memoria, pero deseando que se mantuvieran para siempre en sus sentidos. Chuuya no noto en qué momento comenzó a devolver el beso con la misma ansiedad que el vampiro... hacia calor y no podía respirar, pero no querida detenerse, si no hubiera sido por Dazai que a regañadientes lo dejo ir, quizás hubiera preferido desmayarse

- Eso es suficiente ¿Verdad? - susurro Dazai contra sus labios que hormigueaban

- Sobre que - espeto el cambiante anhelante del toque de su compañero

- La marca, Chuuya, debe comenzar con contacto ¿No? Tú lo sabes mejor que yo - sintió la sonrisa del castaño contra sus labios, al mismo tiempo que inclinaba levemente su cuello dejando entrever su piel a través de la camisa que usaba - Adelante, antes de que me empiece a doler el cuello por estar a tu nivel, Chibi

- Idiota - se quejo el cambiante, aunque termino por acercar sus labios a la piel de Dazai, besando justo donde se unía el cuello y el hombro de su compañero, lamiendo con lentitud su cuello sintiendo como el vampiro se estremecía...si, definidamente el vínculo de un cambiante debía iniciar con toques entre ambos, era un tipo de cortejo que solo ocurría entre los destinados, suponía que su compañero lo había investigado

Lo Que El Corazón Anhela - Soukoku//ShinsoukokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora