Todo el mundo se quiere acostar con el chico malo. Y cuando lo consiguen, buscan más y más y más.
Pero no lo logran, porque los chicos malos solo quieren algo del momento, algo de usar y tirar.
Y todo el mundo sueña con ser la persona que clichémen...
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—Diooos, malditos maestros y sus estúpidos proyectos — se queja Nayeon mientras estira los brazos, tratando de desperezarse.
—Te dije que teníamos que empezar antes — le regaña Hyejin, todavía acomodando sus pertenencias dentro de su bolso.
Ambas se dirigen a la salida del edificio, comentando lo tarde que era, la universidad estaba casi desierta, ya que todas las clases habían acabado horas antes. Sin embargo, ambas se quedan calladas al oír algunos quejidos de dolor, se miran entre sí, debatiéndose entre ir a ver qué es lo que ocurre o simplemente seguir su camino, pero las dos saben que uno de sus defectos más grandes es la curiosidad.
Así que ambas se dirigen a pasos ligeros y sutiles al lugar donde provienen los ruidos, y con un poco más de atención logran reconocer una voz. Las chicas consiguen esconderse en un lugar que les permita presenciar la escena por completo, sorprendiéndose de ver a Jeon Jungkook hablando con otro chico que se encuentra tirado en el suelo y, que ellas suponen, tendrá algún que otro golpe en la cara.
—Muy bien, entonces ¿qué es lo que tienes que hacer? — pregunta el azabache como si estuviera hablando con un niño.
—Dejar de molestar a Kim Taehyung — dice el chico con voz entrecortada, no saben si por el miedo o por los golpes recibidos.
—Muy bien, me encantan las personas que saben seguir órdenes — dice Jungkook con una sonrisa socarrona mientras se arrodilla para quedar a la altura del contrario — Y que esta sea la última vez que te vea molestándolo, ¿eh? — sin fuerza le da unas palmaditas en la cara al otro chico, como si fueran amigos de toda la vida o como si estuviera felicitando a un perro, antes de ponerse de pie y retirarse del lugar.
Tanto Nayeon como Hyejin estaban estupefactas con todo lo que habían visto y mientras se dirigían al apartamento que compartían juntas no podían dejar de pensar en eso.
—Bien, eso fue extraño — comenta Nayeon rompiendo el silencio que se había formado entre las dos —Jeon Jungkook defendiendo a alguien, es algo... — deja la oración en el aire sin saber cómo continuar.
—¿Raro? ¿Poco común? ¿Imposible? — pregunta de manera repetida Hyejin — Vamos, puedo agregar más sinónimos a la lista, finalmente Jeon es alguien que solo se preocupa por su propio culo — suelta la azabache.
—¿Quién es Kim Taehyung? ¿Su amigo? — pregunta con curiosidad la castaña — Creo que he escuchado su nombre antes — dice de manera pensativa.
—¿No compartimos algunas clases con él? — cuestiona Hyejin tratando de recordar de donde conocen ese nombre.
—Creo que sí— contesta de forma insegura Nayeon —Tampoco le presto mucha atención a nuestros compañeros — dice encogiéndose de hombros.
Tratando de no darle más vueltas a un asunto que no les incumbe, cambian de tema, para centrarse en pensar que cenar esa noche.
No es, sino más tarde, mientras Nayeon se encuentra en la pequeña mesa del comedor haciendo sus deberes y Hyejin lavando los platos sucios, que a la azabache repentinamente la golpea un recuerdo.
—Nayeon — llama la azabache saliendo de la cocina.
—¿Hmm? — balbucea la contraria, dirigiendo una mirada a su amiga.
—¿Kim Taehyung no es el chico virgen?
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Ayudaaaaa, la universidad me trae como su perra :((
