Dieciséis

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Al llegar a la universidad, todo el mundo lo veía, desde que puso un pie en la puerta de la entrada todas las cabezas giraron a verlo.

Se sentía diminuto, en cada paso sus piernas temblaban más. Aún los de otras facultades lo veían, algunos chicos tenían el descaro de pasar a su lado y decirle propuestas indecorosas.

No entendía qué pasaba, las fotos que le llegaron ayer solo se las habían enviado a él ¿Verdad? En ese momento sintió que alguien lo tomaba del brazo y lo metía al baño.

―Hey, Sti ¿Qué pasó, amigo. Cómo estás?

―No lo sé, Zee. Todo el mundo me observa y dice cosas horribles. Tengo una resaca de mil demonios y no comprendo qué es lo que pasa.

―Ay, Sti. ¿No te llegaron las fotos?

La sangre abandonó su rostro, las manos le empezaron a tembrar, su respiración se agitaba. Zayn no podría estar hablando de las mismas fotos que le llegaron ¿cierto? Deberían ser otras fotos.

―¿Qué fotos?― trabandose son su propia lengua y tartamudeando las palabras preguntó.

―Las fotos de Derek y tú. Toda la universidad las tiene.

Ahora sí que estaba jodido.

Inalcanzable Where stories live. Discover now