Don't Judge me

Epilogo

Las gotas frías de lluvia inundaban el rostro de todos los presentes.

Sensaciones de tristeza, miedo y sorpresa estaban más que latentes.

Palabras de consuelo a los más allegados al ser que acababa de partir de ese mundo.

Al inicio, la cantidad de personas fue enorme, debido a que aquel ser era reconocido por la hazaña de desenmascarar a aquellos que tenían ciega a la sociedad.

Pero, como era de esperarse, sólo quedaron los más íntimos.

Uno de ellos, el que compartía un lazo sentimental y legal muy profundo con el difunto, se alejo del lugar para acercarse a la presencia que veía desde las sombras.

-Lo lamento-Exclamo sin rodeos el recién llegado sorprendiendo al de incógnito.

-Soy yo quien debería decir eso.

-No, creo que lo necesita más que yo. Por cierto, ¿no va a despedirse? Él lo hubiera querido.

-Yo... No creo ser capaz de...-Empezó a tartamudear el contrario con dificultad.

-Por favor, su voluntad fue que usted fuera el último en quedarse aquí con él.

El más entero, tomo al ser de las sombras y lo encaminó hasta el lugar de sepultura.

Pero, al llegar, el sujeto no aguanto más y cayo de rodillas deshaciéndose en lágrimas mientras veía las letras de aquella persona amada plasmadas en la lápida.

-¿Por qué...? ¿Por qué tuvo que irse, Bocchan?

-Mi esposo cumplió su tiempo aquí, parece que era el momento de dejarnos aqui-Solto de forma sincera el de ojos mieles conmocionando al contrario.

-¿Cómo es que estas tan normal? ¿No lo amabas?

-Lo amo, fue mi esposo, la persona que ame desde la primera vez que lo vi, pero por ese amor es que me mantengo firme en apoyar a la persona que él amo aparte de mi.

-Bocchan... Ya veo porque Masahiro no huyo conmigo, era porque eres tan bueno que no podía lastimarte, además que te amaba-Confeso el pelinegro con vergüenza obteniendo un suspiro y encogimiento de hombros que confundió más a este.

-No como hubiera querido, siempre lo envidie por los sentimientos de Masahiro hacia usted y, por ello, alguna vez estuve por matarlo. Pero comprendí que no era justo, el casarme con él fue para que usted viviera, y aún cuando estar casado con el fue de ensueño, también lo lastime mucho por obligarlo a esto.

-Claro que no, él decidió hacer esto por voluntad propia.

-Por amor a usted, no porque me quisiera a mi. Sin embargo, me enfoque en aprovechar el tiempo lo mejor que pudiera antes de que usted apareciera ya que sabía de las altas probabilidades de que Masahiro tuviera dudas.

"Es por ello que el dia en que nos encontramos, insisti en que el se comunicara con usted y pudieran aclarar las cosas lo antes posible.

Aunque debo admitir que me sorprendió bastante que no huyeran esa última vez que se vieron"

-¿Lo sabías?-Pregunto el pelinegro confundido sin atreverse a ver al contrario.

-Así es, reserve boletos para que huyeran, programe más trabajo para distraer mi mente por varios meses y, cuando regrese, me lleve la sorpresa de que mi esposo aún estaba esperándome.

-Es porque Masahiro no era capaz de evadir los compromisos que adquiere.

-Lo se, y por ello es que le doy las gracias, por no apartarme a mi esposo, aunque no duró mucho.